¿Cuál la postura de los 48 cantones acerca de la minería y la construcción de hidroeléctricas?

Para nosotros no es un modelo de desarrollo, ya que Totonicapán se caracteriza por ser fuente de varios ríos, cobertura boscosa, por lo que la minería no es un modelo que nos interese para generar riqueza; debido a que esta va solo a unos cuantos, y no regresa en calidad de servicios para la población; por eso le decimos que no a la minería.

Respecto de la generación de energía hidroeléctrica en el país, creo que ha habido confusión en los discursos. No es que digamos no a la energía renovable, lo que nosotros decimos es no a la manera poco transparente en la que se hacen los negocios, y el dinero de la empresas se va fuera del país y no regresa en empleos.

¿Si fuera más transparente, podrían aceptar ese tipo de proyectos ?

Hay una visión compleja del tema minero. ¿Para qué se está extrayendo metal? En el bosque comunal de Totonicapán tenemos un lugar donde se extrae material para la construcción, que es una forma de hacer minería, pero la de metales preciosos contamina.

Los pueblos indígenas nos preguntamos para qué extraen el oro si menos del 12 por ciento del oro en el mundo sirve para la tecnología médica, lo demás se usa para lingotes que garantizan la riqueza de los ricos y la pobreza de los pobres.

¿Con qué tipo de minería sí estarían de acuerdo?

Hay metales que son útiles a la medicina, para hacer prótesis. Creemos que hasta que la legislación nacional sea fuerte vamos a tener empresas que cumplan con esos estándares. Se habla de regalías, y eso ofende. ¿Nos regalan a cambio de que se llevan nuestros recursos?

¿Porqué la población se opone a esos proyectos?

Es por la falta de consulta previa ordenada y de buena fe, se debe preguntar a la gente si está de acuerdo o no.

Nuestra posición es clara, por lo que lamentaríamos que, aunque la población haya dicho que no, ellos llegaran; eso podría generar conflictos.

El Gobierno intentó regular las consultas, pero también hubo oposición.

No nos oponemos a la regulación, el desorden en el que se vive en el país es el que genera la conflictividad, ya que los pueblos indígenas son diferentes, y cuando se intenta crear un modelo para todos, hay problemas.

¿Si la población participara como socia de las empresas mineras, cambiarían de opinión?

En el tema de minería no, ya que generamos más riqueza con bosques. Sí pensamos ser socios desde una cooperativa, una empresa comunitaria, para ser socios directos.

¿Por qué la oposición a las hidroeléctricas si estas generan energía renovable?

Apostamos a generar nuestra propia energía, sabemos que hay posibilidad de generarla sin dañar la naturaleza y que tenga una tarifa justa para la población.

¿Estarían de acuerdo a que se explote la energía hidroeléctrica en el país?

Sí, cuando se hace con responsabilidad y en consenso con la comunidades.

¿Hay algún proyecto hidroeléctrico en Totonicapán?

No, y el primero será de los 48 cantones y las comunidades, pero lo vemos imposible solo con capitales privados.

¿Entonces no es válido que exista capital extranjero para este tipo de proyectos?

Nosotros tenemos claro que vivimos en un libre mercado. No nos generaría problema hacer negocio con un empresa internacional, si esta respeta nuestra organización.

¿Podrían mediar en otros conflictos que ocurren en el país?

Acompañamos a líderes que han sido víctimas de acoso. No podemos mediar cuando nosotros también hemos sido víctimas.

El Gobierno debe presentar sus mecanismos de mediación. Hay una supuesta mesa de diálogo; sin embargo, vemos que en este gobierno el sistema de diálogo no funciona, por que es un modelo autoritario.