El diario inglés The Guardian difundió el 3 de este mes una exclusiva en la que se revelaron los primeros detalles del texto, como las críticas del exasesor Steve Bannon a Trump y su familia.
El presidente estadounidense expresó su molestia por el texto. Su reacción funcionó para que Fire and Fury se diera a conocer aún más. “Gracias, señor presidente”, tuiteó Wolff.
Here we go. You can buy it (and read it) tomorrow. Thank you, Mr. President.
— Michael Wolff (@MichaelWolffNYC) January 4, 2018
El libro, en su primer fin de semana en librerías, vendió más de 29 mil copias de tapa dura, 250 mil ebooks y más de 100 mil audiolibros, según John Sargent, CEO de Macmillan.
Y ahora, en español
Como era de esperarse, las editoriales españolas se sumaron a una subasta atractiva, con la mayoría de las casas listas para pujar más de Q150 mil.
Finalmente fue Planeta, que desembolsó cerca de Q600 mil (60 mil euros), dejando atrás a la otra gigante, Penguin Random House, como explica el diario El Español.
Planeta espera tener lista la traducción en tres semanas y tenerlo en librerías en dos meses. El libro se llamará Fuego y furia. En las entrañas de la Casa Blanca de Trump“.
El texto de Wolff narra la desconfianza hacia Trump por parte de exintegrantes de su equipo de trabajo, como Steven Bannon y Sean Spicer, y gran parte del partido republicano, que incluso duda de la salud mental del funcionario.
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Según Wolff, Trump se duerme a las 18:30 en una habitación separado de su esposa Melania, quien lloró el día de la victoria de Trump en las elecciones, además de los cuestionables hábitos alimenticios del ahora presidente.
Contra la difamación
El mismo Trump propuso este miércoles modificar la legislación vigente sobre difamación, a raíz del lanzamiento del libro que creó un caos en la administración de la Casa Blanca, explicó la AFP.
“Vamos a dar una mirada muy seria a las leyes de difamación en nuestro país”, dijo el presidente al final de una reunión con su gabinete para discutir el primer año de gobierno y los planes para el futuro.
Para el mandatario, las leyes deberían ser cambiadas de forma que “cuando alguien dice algo que es falso y difamatorio sobre una persona, ésta tiene una capacidad de recurrir a las cortes”.
