20 años después, el 21 de marzo de 2013 Arjona es galardonado con la Orden del Quetzal en el grado de Gran Collar, por sus méritos artísticos dentro y fuera del país, presea entregada de manos del presidente de Guatemala Otto Pérez Molina.

En esa ocasión el cantante dedicó la condecoración a su padre Ricardo Arjona Moscoso, fallecido en el 2010, en la ceremonia oficial que se celebró en el Patio de la Paz, del Palacio Nacional de la Cultura, del Centro Histórico de la capital guatemalteca.

La Orden del Quetzal es la máxima distinción del Gobierno de Guatemala, instituida en 1973 para reconocer a dignatarios de otras naciones y a quienes se destacan en su labor cultural, humanitaria, científica o política.

La exitosa carrera artística y de apoyo a la educación que ha desarrollado Ricardo Arjona, es seguida de cerca por autoridades de universidades guatemaltecas y de otros países, pues sus buenas acciones lo han convertido en candidato a obtener un doctorado Honoris Causa.

El jefe de Gobierno de la capital de Buenos Aires, Argentina, Mauricio Macri, y otros funcionarios, en el homenaje a Ricardo Arjona, en la avenida Callao, de la mencionada ciudad, por la canión Cómo olvidarme de Martha.

En Argentina

Otro reconocimiento singular, que Arjona no lleva colgado al pecho, pero sí en el corazón, es el ofrecido por Mauricio Macri, jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires, Argentina.

El 14 de mayo del 2012, el funcionario invitó al cantante guatemalteco a develizar un plaqueta instalada en la avenida Callao, frente al #783, que contiene la letra de la canción Cómo olvidarme de Martha, en la que Arjona refiere el amor de un hombre por una stripper del barrio de Recoleta, además de hablar de Borges y de la calle Florida.