Las de los marineros galos eran de tejido de punto y con 21 rayas, una por cada victoria de Napoleón contra los británicos. Pero su sentido no era solo simbólico: cuando un marinero se caía al agua, era mucho más fácil localizarlo si iba vestido a rayas.

¿Cómo pasó a convertirse en una prenda de mujer? La respuesta es sencilla si pensamos que ha partir de la segunda mitad del siglo XX, las damas han hecho suyo casi todo lo que tradicionalmente había sido de los hombres.

Coco Chanel la incluyó en su colección náutica de 1917, y consiguió que el atuendo marinero se convirtiera en el favorito de la alta sociedad que veraneaba en la Riviera francesa.

Después de la primera guerra mundial, en la década de 1930, el suéter cerrado marinero comenzó a llevarse de manera habitual con pantalones anchos y blazer, y en la década de 1950, la hicieron suya celebridades y artistas como Marilyn Monroe, James Dean, Audrey Hepburn, Picasso, Brigitte Bardot y Jean Seberg.  Con información de www.harpersbazaar.es