Salud y Familia

Ayuno y reflexión marcan la época

Hoy —Miércoles de Ceniza— comienza la Cuaresma y muchos católicos en el país empiezan a prepararse espiritualmente para recibir la Semana Santa, que se conmemora en abril próximo.

Una de las maneras en las que algunos creyentes purifican su cuerpo en esta época es a través del ayuno parcial o total, el cual siempre va acompañado de la oración, según la tradición católica.

“En términos médicos, el ayuno consiste en abstenernos de ingerir uno o varios alimentos en un tiempo definido. Este puede ser intermedio —no hacer un tiempo de comida— o prolongado —no comer por más de 14 horas—”, explicó el martes Ana Elisa Pacheco, nutricionista de Newtrition Center, durante El Consultorio, de Prensa Libre.

A criterio de la experta, esta abstinencia alimenticia tiene varios beneficios si se hace esporádicamente y con supervisión médica. “Ayuda a desintoxicar el organismo, ya que evitamos la ingesta de grasas, carnes y azúcares. Esto hará que el organismo elimine toxinas”, agregó Pacheco.

Es importante tomar en cuenta que el ayuno ocasional y controlado solo está recomendado para personas físicamente sanas y que no padezcan ninguna alteración metabólica. “No es prudente que niños, embarazadas o personas con diabetes, se salten algún tiempo de comida, pues su organismo podría descompensarse con más facilidad”, aclaró la nutricionista.

En el caso en el que haya alguna restricción médica para ayunar durante la Cuaresma, se sugiere que la persona haga algo más simbólico,  “como no ingerir algún alimento que le guste mucho o que sustituya la carne roja por la blanca, por ejemplo”, explicó Pacheco.

Más consejos

Si alguna persona decide ayunar por varias horas, necesita tomar suficiente agua para no deshidratarse. “Recordemos que nuestro cuerpo es 70 por ciento agua y debemos beber dos o más litros de líquido al día”, recalcó Pacheco.

Otro aspecto importante es tener en cuenta el menú que se comerá luego de las horas de ayuno, con el objetivo de prevenir malestares estomacales. “Se aconseja que el plato tenga principalmente verduras cocidas y carne baja en grasa y sin muchos condimentos —pollo o pescado—, así como alimentos crujientes —semillas o pan integral tostado—”, dijo la invitada.

Según Pacheco, también se tiene que tener un plan alternativo en caso de que la persona sienta mareos, dolores de cabeza o desgano, durante el ayuno. “Ante estos síntomas podemos tomar un jugo de frutas o comer algún dulce, ya que esto nos dará energía”, concluyó.

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