¿LOS CONOCE?
Como el Tide Pod Challenge, en el que se incitaba a las personas a comer cápsulas de detergente como si fueran caramelos y que llevó a Tide a tomar medidas para evitar más heridos.
En las últimas semanas se popularizó —de nuevo— el Condom Snorting Challenge (reto de inhalar condones), que se trata de inhalar un preservativo por una de las fosas nasales, pasarlo por la faringe y que salga por la boca.
Si bien la “dinámica” fue conocida hace cinco años en las bases de datos digitales, ha reaparecido y alcanzado nuevos públicos.
Lesiones severas
Según el médico Luis Stolz, el reto del preservativo puede provocar heridas graves en el cuerpo humano que varían desde laceraciones hasta intoxicaciones.
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“Todo objeto que entra por las narinas (los orificios que tiene la nariz) se trata como un cuerpo extraño. El preservativo puede llegar hasta la boca porque la nasofaringe y la orofaringe están comunicados”, explica el especialista.
Eso, agrega, “puede, para empezar, lesionar la mucosa adentro de la nariz. Si se lesiona puede sangrar y un vaso en la nariz puede llegar a ser ‘escandaloso’; segundo, de atravesar todo ese camino, puede llegar a la orofaringe y causar una obstrucción mecánica, ahogamiento y hasta asfixia”.
El riesgo de las lesiones en la nariz y boca es alto, además que existen personas con alergia al látex y puede haber un shock anafiláctico si ocurre una exposición prolongada, dice Stolz.
En conclusión, el reto del preservativo es un peligro para las personas y debe evitarse.
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