Luego de tantos años de natación, Wilhelm sintió la necesidad de desarrollarse en otro deporte y se unió al Pentatlón.
“Al salir de la piscina, miraba que en el gimnasio practicaban pentatlón moderno. Por la variedad de disciplinas que se desarrollan —tiro deportivo, esgrima, natación, salto ecuestre y carrera a pie—, me llamó la atención“, dijo el atleta.
El sueño
Wilhelm también se inició en el biatlón y al poco tiempo de estar en ese deporte se enteró de que tenía edad para participar en los segundos Juegos Olímpicos de la Juventud, en Nanjing, China, lo cual lo motivó para seguir con los entrenamientos y se propuso que tenía que lograr ese boleto.
Con su participación en el Campeonato Norceca Juvenil A, B y C, que se disputó en San Cristóbal de La Habana, Cuba, consiguió la marca para las justas olímpicas juveniles.
“Al recibir la noticia sentí una emoción gigantesca, que me hizo llorar de alegría junto a mi mamá, porque se cumple el sueño que tuve desde que era niño, poder participar en unos Juegos Olímpicos, y estar en unas justas de la juventud me hace muy feliz”, expresó Picón.