“Había pasado dos años afuera de Guatemala en estas fiestas, por eso siento gratificante compartir con mi familia, con mi novio y con mis amigos”, comenta.

El balance de su carrera en el extranjero es positivo para la futbolista, que cumplirá 27 años el próximo 8 de enero, pero el camino no ha sido fácil y ha  tenido que superar grandes obstáculos para alcanzar sus metas.

“Nunca he pensado que ser mujer me haga menos o me haga ser más temerosa, sino al contrario, eso me ha dado fuerza para demostrar que las mujeres podemos”, asegura.

“En Guatemala se dice que no se puede salir adelante si se es futbolista y como mujer menos, pero quiero demostrar que sí se puede si uno es determinante con sus cosas”, agrega.

Adaptación y racismo

Ser guatemalteca,  su acento  o algunas de sus costumbres ha sido de lo más difícil que le ha tocado vivir, y   en algún momento  se ha sentido discriminada.

“La integración al grupo es lo más difícil, cuesta hacer entender a mucha gente  por qué estoy allí. A veces creen que soy sudamericana, porque no conocen de Guatemala”, dice.

“Algunas veces han sido discriminativos o un poco racistas, pero siempre he tenido el respaldo del cuerpo técnico y directivos y eso hace que no afecte en el rendimiento”, confiesa.

Martínez, quien además es ingeniera química, afirma que vivir del futbol es algo que no imaginó que podía lograr, pero que es un sueño de niña.

“He aprendido que el único límite es el cielo. No imaginé lograr vivir del futbol. Hay que creer que se puede. Ser humilde, escuchar consejos y entender que uno no lo sabe todo es la base del éxito”, asegura Martínez con una sonrisa. “Cuando era más joven me pasaba, pero aprendí y ahora es diferente”.

Una campaña irregular

Ana Lucía vive su segunda temporada en la Súper Liga de España, que significa  la tercera división en el futbol de ese país. Anteriormente jugó con el Dinamo de Guadalajara, en la liga de ascenso,  y después militó con el Rayo Vallecano, en la máxima categoría.

En esos equipos jugó la mayor parte como titular. Con el equipo de Guadalajara marcó nueve goles y con el cuadro de Vallecas celebró en cuatro oportunidades.

Sin embargo, en el  Sporting se rompió esa continuidad debido a una lesión en el partido debut con el equipo huelveño, en el que  comenzó como titular pero fue sustituida al medio tiempo por una molestia en la pierna izquierda.

“A partir de allí ya no fui tomada en cuenta en el resto de la temporada como titular. Ha sido difícil, pero creo que de todo se aprende y si muchas veces lo fui  en otros clubes, también ha sido bueno ser un revulsivo para el equipo para entrar en cualquier momento”, expresa.

“Gracias a Dios las lesiones, no han sido tan graves, que eso si es un temor real que tengo. Solo me queda trabajar porque en el último partido antes del descanso por el fin de año volví a ser titular. Eso quiere decir que estoy haciendo las cosas bien y debo  estar lista para cuando sea necesario”, manifestó.

El próximo partido del Sporting de Huelva lo disputarán como locales en el estadio La Orden, el domingo 8 de enero, por la jornada 15 de la Súper Liga de España.

El Sporting se ubica en el octavo lugar de la tabla de posiciones, con 18 puntos.

Ana Lucía Martínez viajará el martes 3 de enero a España para unirse al día siguiente al trabajo de su equipo.