Fútbol Nacional

Quiché FC y Sololá provocan que la Primera División sea vista como un foco de trampas y de amenazas a árbitros y jugadores

Quiché FC es señalado por haber hecho jugar a dos futbolistas con otra identidad y Sololá, por amenazar a los árbitros y rivales.

La Primera División vuelve a estar en el ojo del huracán. Las recientes denuncias por amenazas hacia árbitros y jugadores, y por sustituciones indebidas de futbolistas dejan mal parada una vez más a la liga de ascenso.

Quiché FC —tercero del Grupo A— fue acusado la semana pasada por el Deportivo Reu —sexto— por haber “hecho trampa” en dos cambios, pues hizo ingresar a los jugadores Luis Mora y David Aroche con otra identidad. Ayer, el árbitro José Herrera, quien estuvo en el juego entre Sololá y Suchitepéquez, que están peleando por evitar el descenso a la Segunda División, reportó que sufrió serias amenazas y actos intimidatorios, en el estadio Xambá, para favorecer al equipo local.

“Informo que cuando nos dirigíamos a los camerinos, una persona no identificada, nos empezó a insultar y a decirnos; si Sololá no gana el partido, de acá no salen vivos”, consigna Herrera en su reporte arbitral.

“Posteriormente llegaron a la puerta de los camerinos dos personas semitapadas del rostro, también a decirnos lo mismo. Esto ocurrió cuando aún no había llegado la Policía Nacional Civil; al llegar la misma todo estuvo dentro de lo normal”, agrega.

El silbante también señaló que el partido no comenzó a la hora programada, ya que el plantel mazateco aducía que no había garantías para que el duelo se celebrara.

“El partido inició cinco minutos tarde, ya que el equipo de Suchitepéquez se negaba a ingresar al terreno de juego, y un futbolista ingresó a donde yo me encontraba —medio campo— a indicarme que fueron amenazados por personas desconocidas con armas de fuego y solicitaban suficiente seguridad. Afortunadamente llegaron 50 elementos de la Policía Nacional Civil y el partido se realizó con normalidad”, explica.

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Además, el réferi indicó que el tramo final del encuentro se desarrolló con una sola pelota, ya que las otra fueron “escondidas”.

“Desde el minuto 68, el partido se estuvo jugando con un solo balón, debido a que el equipo local escondió los demás”, dijo.

Vuelven a la carga

Luego de que la denuncia del Deportivo Reu no tuviera eco en el Órgano Disciplinario (OD) de la Primera División, la misma fue elevada ayer ante la Federación Nacional de Futbol (Fedefut).

“No es justo que hayan actos deshonestos en la Primera División. No es posible que solo un equipo no quiera cumplir con el porcentaje de minutos de participación de jugadores Sub 20 e infrinja el reglamento para esconder sus actos de corrupción”, dijo Vinicio Cristiani, presidente del Deportivo Reu.

“Hubo mano sucia para que nuestra denuncia no fuera conocida por el OD. Esperamos ahora que la Fedefut resuelva, de lo contrario nos iremos a la Fifa. Sigo sin entender como el técnico de Quiché FC —Marlon Iván León— hizo esas trampas”, agregó Cristiani.

De proceder ante la Fedefut su acusación, el conjunto quichelense podría ser castigado con la pérdida del partido o incluso hasta con la desafiliación. Además deberá pagar una multa económica y los jugadores involucrados y el técnico podrían ser suspendidos de por vida.

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