Batres dijo que en la actualidad, Bayer cuenta con cinco líneas de producción —dos de efervescentes, dos de empaque de blíster y uno para empaque de frasco—, con capacidad de producción de 900 mil tabletas por hora.
“Solo la línea tendrá la capacidad de producir dos mil 400 tabletas por minuto —144 mil por hora—; sin embargo, todo dependerá de la cantidad de horas en funcionamiento”, resaltó el ejecutivo.
La demanda de producción proyectada para el 2011 es de mil millones de tabletas —la capacidad instalada actual de la planta es del 70 por ciento—, pero con la nueva línea de producción esta aumentará en aproximadamente 15 por ciento.
Según Manuel Farfán, gerente de la planta, el mercado farmacéutico en general en Centroamérica es de entre US$1 mil millones y US$1 mil 500 millones, de los cuales entre US$500 millones y US$700 millones son del segmento de productos de automedicación; en este mercado, Bayer tiene un 40 por ciento de participación.
De acuerdo con datos de la compañía, en el 2009 su producción alcanzó los 840 millones de tabletas, y en 2010, 940 millones; en 2011 se proyectan mil millones, y para 2012 se prevén mil cien millones.
Según Farfán, el crecimiento previsto este año en el mercado de las medicinas autorrecetables en la región es de entre 8% y 10%; en el caso de Bayer, la evolución se ubicará por arriba del 10%.
El ministro de Economía, Luis Velásquez, refirió que la inversión de Bayer es positiva para el país, ya que es una muestra de la confianza de las industrias para seguir operando en Guatemala.
Velásquez, quien participó el miércoles recién pasado en la reunión del Consejo de Ministros de Economía de Centroamérica (Comieco), señaló que precisamente ese fue uno de los temas abordados, el de apoyar las estrategias regionales para atraer inversión en el área.
