Esta situación podría prolongarse por dos años si Guatemala no toma las medidas necesaras para mejorar su evaluación.
Según el catálogo de definiciones de calificaciones de S&P, BB significa que el sujeto de calificación, en este caso Guatemala, “enfrenta constante incertidumbre y exposición ante situaciones económicas adversas, lo que puede llevar a que tenga una capacidad inadecuada para cumplir con sus compromisos financieros”.
El país ya tenía la calificación BB y se le agregó un signo menos (BB-) para indicar su vulnerabilidad ante los cambios económicos.
La crisis
La inestabilidad política a la que se refiere S&P comenzó el 27 de enero pasado cuando el presidente Jimmy Morales declaró non grato al director de la Cicig, Iván Velásquez, e intentó expulsarlo del país.
Otro evento que agravó la crisis fue el denominado Pacto de Corruptos que hicieron 107 diputados al aprobar reformas al Código Penal para favorecer a políticos señalados de financiamiento ilícito y ampliar las penas conmutables.
Estas acciones de los políticos causaron masivas manifestaciones en la capital y el interior del país, exigiendo renuncias y cambios en el sistema electoral. La manifestación de rechazo llegó hasta Washington con la reciente recomedación de congresistas estadounidenses para Estados Unidos retire la visa a guatemaltecos corruptos.
Visita de S&P
En septiembre pasado, en medio de la crisis política, llegó al país una delegación de la calificadora Standard & Poor’s con el objetivo de apreciar de cerca la situación política y económica que atraviesa Guatemala.
Luego de la decisión de Morales contra Velásquez, la agencia de calificación Moody’s advirtió que la prolongación de la crisis política podría bajar aún más el nivel de inversión y el crecimiento económico del país.
La agencia Fitch Raitings también se pronunció y destacó que Guatemala ocupa el lugar más bajo en la región con un débil estado de Derecho, una alta incidencia de violencia y una legislatura fragmentada.
Reacciones
Exfuncionarios y analistas han reaccionado ante la baja en la calificación económica de Guatemala.
“La situación nacional empieza a pasar factura”, escribió en Twitter Mariano Rayo, exministro de Salud y miembro de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asies).
Mario García Lara, excandidato a la vicepresidencia por el partido Todos, dijo: “¿No entendemos?”.
El economista José Raúl González Merlo expresó que el descenso en la califación hace al país menos atractivo para la inversión. “Vamos a más migración y pobreza. Entonces?”, tuiteó.
Por su parte, el exministro de Economía del actual Gobierno, Rubén Morales, dijo que “aunque la economía nacional es resiliente, tendrá sus efectos”.