Si se excluyen los componentes electrónicos, como los de Intel, el crecimiento de las exportaciones fue de 4% pero alcanza una cifra muy inferior, de US$4 mil 879.2 millones, según las cifras de la dependencia.
Las ventas de Intel en el primer semestre de este año se redujeron 7.7%, al pasar de US$1 mil 130 millones el año pasado a US$1 mil 42 millones este año.
“El efecto en las exportaciones de bienes por la salida de la planta de manufactura de Intel es evidente”, admitió el ministro de Comercio Exterior, Alexánder Mora.
Intel anunció en abril el cierre de su unidad de ensamblaje y prueba en Costa Rica, con el despido de mil 500 empleados, un golpe a la economía del país centroamericano para el cual el sector de procesadores de informática representa el 20% de sus exportaciones.