Los diplomáticos escucharon la vivencia de las primeras 23 socias que en tres años de trabajo llegaron a tener 318 integrantes.
Las cooperativistas cuentan con un centro de acopio donde reciben productos de plantaciones propias y de comunidades aledañas. María Victoria Arriaga, integrante de la cooperativa, manifestó que están conscientes de que la cooperación no será permanente, por lo que trabajan en hacer el proyecto autosostenible.
La cooperativa incrementó su producción de 456 mil libras de producción a más de 2 millones, lo que representa en ventas de Q190 mil a más de Q950 mil.
Los cultivos de mayor producción son ejote francés, arvejas china, criolla y dulce, así como el suchini, las mini zanahorias y elotes.
Una de las beneficiadas, Piedad Flores, dijo que tenía una hipoteca de Q 23 mil que no podía pagar, pero logró recuperar su terreno y con la producción obtuvo cinco cuerdas más para hacer crecer su negocio.
Los embajadores también visitaron proyectos en Chimaltenango, Zaculeu, Tecpán Guatemala, Retalhuleu y Quiché, financiados por el Programa Mundial de Alimentos, la FAO y el Fondo Internacional de Desarrollo Agrícola (Fida).
La gira de la diplomática terminó este sábado en San Andrés Villa Seca, Retalhuleu.