Antecedentes
Desde el invierno del año pasado a la fecha, la lluvia y una mala instalación del sistema de drenajes destruyó 10 viviendas en la misma área, y pese a que entre 45 y cien están en igual riesgo, vecinos indican que las autoridades ofrecieron ayuda pero nunca se concretó y el problema persiste.
En octubre pasado se registró una crecida en el río Pinula y el colapso de otras tres viviendas del sector 4 de Villa Hermosa 1. Hace seis días, una porción de terreno cayó al río y dejó en peligro de caer a dos viviendas más del mismo sector.
Manuel Chavarría, geólogo de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, informó que desde que comenzaron las emergencias, esa institución ha desarrollado 14 informes distintos donde precisan el peligro en que están los inmuebles que se ubican en orillas del río.
“El mayor error que encontramos es que los drenajes de todas las colonias colindantes fueron ubicados a medio talud, en vez de desembocar directamente en el río. Esto provoca que aunque no haya crecidas en el río, el agua de los drenajes erosione la tierra y provoque el colapso de las viviendas”, explicó Chavarría.
Drama
Zoila Marina González, de 53 años, quien vive con sus tres hijos y dos nietos en el sector 4, a escasos metros de donde ocurrió el anterior derrumbe, narró que su casa está a punto de ser destruida, y que a pesar de haber pedido ayuda a las autoridades, nadie se ha acercado para brindarle apoyo.
“No tengo otro lugar a dónde ir con mis hijos y nietos. Da tristeza que las pocas cosas que tengo para vivir estén en peligro de perderse para siempre de un momento a otro”, declaró González, mientras ella y sus nietos lloraban al ver su vivienda.
Leonel Rodríguez, 70, vecino de González, quien vive con su esposa y fue plomero durante casi toda su vida, explicó que el patio de su vivienda ya cayó al río y reza para que no ocurra lo mismo con el resto del inmueble.
“Esta casa significa el esfuerzo de toda mi vida. A mi edad nadie me da trabajo; además, mi cuerpo ya no responde como antes”, dijo Rodríguez.
Explicó que construyó su vivienda pensando en alquilar un apartamento y tener un ingreso, pero debido a la inseguridad no lo hace para no “arriesgar la vida de nadie”.
La misma situación de angustia afronta el resto de propietarios de los inmuebles ubicados a la orilla del río, quienes temen que con la llegada del invierno la situación empeore. Según cálculos de las autoridades, al menos cien familias corren riesgo.
Mitigación
Érick Girón, concejal tercero de la Municipalidad de San Miguel Petapa, aseveró que como medida inmediata trabajarán para que el agua del alcantarillado llegue directamente al río, para evitar más erosión y que algunas casas colapsen.
Girón explicó que para los trabajos mayores de mitigación se necesitan al menos Q10 millones, y que por ahora no tienen fondos para ese propósito. El concejal pidió al Gobierno Central que los apoye para atender a las familias afectadas.
Según Alejandro Sinibaldi, ministro de Comunicaciones, Infraestructura y Vivienda, no han recibido de manera oficial ninguna solicitud de la comuna y que la cartera tiene cierto rango de acción, porque la Contraloría no le permite trabajar en algunos casos.
“Si recibimos una solicitud de forma puntual, lo menos que podemos hacer es una revisión y sacar un estudio preliminar para ver en qué se puede apoyar. Hemos ayudado a muchas municipalidades”, aseguró Sinibaldi.
