Debido a un procedimiento adicional que se realizó durante la operación de Haider Palencia esta es considerada como la primera en su clase. La mitad del hígado que fue donado por su madre, Jackeline de Haider, fue reducida a una cuarta parte, ya que era muy grande para ser colocada en el cuerpo del niño.
El niño padecía atresia biliar, una obstrucción de las vías biliares, que hacen que la bilis se acumule en el hígado y cause ictericia, la Embajada de Taiwán en Guatemala gestionó su operación en aquél país, de manera gratuita y a cargo del doctor Chen Chao-long, considerado el mejor médico en el mundo para realizar estos procedimientos.
El 26 de octubre, el menor fue dado de alta del Hospital Chang Gung, donde se realizó la cirugía, desde entonces, la mejoría del niño ha sido satisfactoria, por lo que podrá volver al país antes de que termine el año.