El romanticismo invade cada Miércoles Santo por la noche la ciudad de Huehuetenango, donde se lleva a cabo la tradicional serenata, que consiste en el ensamble de 10 marimbas en la plaza central, que deleita a cientos de asistentes.

A la actividad se suman tríos y mariachis, que son contratados para llevar serenata a varios hogares. La fiesta culmina el Jueves Santo por la madrugada, y este año fue dedicada al músico Édgar Fernando Calderón Theisen.

Yolanda Alfaro García, integrante de la Casa de la Cultura, indicó que la referida tradición se inició en 1926 y que originalmente servía para evitar que las amas de casa se durmieran mientras preparaban la conserva de frutas.

Dramatizan martirio

Cobán, Alta Verapaz, fue el escenario el martes último de la dramatización de la Pasión de Cristo, en la que actores escenificaron el sufrimiento de Jesús en su camino al calvario.

Al igual que en otros lugares, la Pasión de Cristo también será dramatizada mañana en Chiantla, Huehuetenango.

La comida típica no podía faltar, y muestra de ello es el tradicional pan y conservas de frutas que prepara Emilia Francisca Tello, de 83 años, en el referido municipio.

En la aldea Chivarreto, San Francisco El Alto, Totonicapán, el Viernes Santo tiene algo especial, ya que cientos de personas se dan cita para presenciar la denominada “Pelea a puño limpio”.

Quema de judas

La tradicional quema de Judas aún persiste, y en cada lugar varían las actividades antes de quemar el monigote el Sábado de Gloria. En el cantón Palinox, San Sebastián, Retalhuleu, el muñeco es azotado, y ayer varias personas le pidieron protección. Luego fue sacado a la calle, donde quienes lo elaboraron piden pan y dinero.

Para otras familias, lo más importante es lo espiritual.

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Con información de M. Castillo / E. Sam / E. Domínguez / R. Miranda / J. Tizol / A. Martínez