Cabe recordar que en la administración de Pedro Muadi se autorizó el uso de Q31 millones de los ahorros del Congreso para cumplir con el pago de sueldos, debido a que hubo un incremento considerable en la contratación de personal, muchos de ellos presupuestados.
Para Crespo, el proyecto de presupuesto se enviará esta semana a la Comisión de Finanzas y Tesoro para ser conocida y dictaminada, ya que los gastos pueden ser conocidos en el pleno en cualquier momento y aprobados a través de un acuerdo legislativo.
Justifica alza
De acuerdo con Crespo, el incremento en los gastos corresponde a los compromisos que tiene ese organismo con los empleados a través del pacto colectivo, que establece un incremento anual del 10 por ciento de sueldos.
Otro gasto extraordinario que se agrega a la proyección de gastos para el otro año es la remodelación de la Casa Larrazábal, obra que se desarrolla con el apoyo de la Embajada de Taiwán en Guatemala.
“Se proyectó un aproximado de Q15 millones para remodelar la Casa Larrazábal, no solo por ser un bien inmueble del Congreso, sino porque se trata de un patrimonio histórico de este país que debemos de conservar y proteger”, justificó el presidente del Legislativo.
Este año, el Congreso presupuestó Q477 millones 372 mil para el pago de sueldos para diputados y personal temporal y por contrato, así como Q42 millones 598 mil en servicios no personales, que incluyen viáticos y gastos de representación.
Críticas
Óscar Vásquez, director de Acción Ciudadana, lamentó el incremento de los gastos del Organismo Legislativo, y advirtió de que corresponde no solo al incremento salarial, sino al número de empleados contratados.
“Cada vez que se contrata a alguien, se encarecen los costos administrativos. Además, el aumento del 10 por ciento es insostenible; llegará un momento cuando los gastos de salarios ya no puedan ser cubiertos por el Estado, por lo que urge una renegociación del pacto colectivo”, expresó.
Enclave
Para Édgar Gutiérrez, director del Instituto de Análisis e Investigación de los Problemas Nacionales de la Universidad de San Carlos, el Legislativo debe aprobar el Presupuesto de la Nación para sostener sus gastos; de lo contrario, “se verá un harakiri”.
“El presupuesto es unitario, no se puede aprobar uno y el otro no; o se creará un enclave dentro del Estado, lo que es sumamente grave”, expresó.
