El nombre Maximón, lo conocen en el pueblo como atado o amarrado, que en ésta época lo relacionan con el papel de Judas Iscariote, ya que después de la crucifixión de Jesús, la imagen del Gran Abuelo es atada por cuello, para representar el ahorcamiento de Judas que quiere matarse por haber traicionado a Jesús.
Muchos visitantes llegan a Santiago Atitlán para elevar sus plegarias a Rilaj Mam; jovencitas, jóvenes, personas adultas ofrecen su puro, dinero, comida, licor, candelas, con sus propias penas o peticiones, son decenas de plegarias, manifestó María Encarnación Ixtulul, una de las creyentes en Maximón, quien acompaña también la imagen en su capilla.
Quienes han visto la imagen saben que consiste en un trozo de madera que llaman palo de pito de aproximadamente 1.30 metro de alto, el cuerpo está envuelto con trapos y hojas de maíz, vestido con traje típico de la localidad y con una gran cantidad de pañuelos, un trozo de madera que forman la cabeza y encima le ponen una máscara de madera. Unos dicen que dentro del cuerpo se oculta un ídolo de piedra o de oro, y es considerado el bien y el mal, lo cual depende de lo que le pidan.
La cofradía de Santa Cruz custodia a Rilaj Mam atado en un palo en la capilla que se ubica a un costado de la iglesia católica del municipio, es visitado por miles de visitantes, tanto locales como extranjeros.
El recorrido procesional concluyó a eso de las 20 horas, y luego Maximón fue cargado por el tilinel (cargador), luego fue atado en su propia capilla.