En el avión, que se dirigía de Kuwait a Londres, viajaban unas 200 personas.
La aparición de humo en la cabina del piloto obligó a éste a aterrizar antes de lo previsto.
“Después del anuncio del piloto, indicando que deseaba aterrizar, pusimos inmediatamente en marcha todas las medidas de seguridad previstas para este tipo de situaciones” , dijo la portavoz.
“El aterrizaje se ha desarrollado sin problemas. Todos los pasajeros han abandonad el avión”.
Los bomberos han examinado el avión, aunque el origen del humo en la cabina del piloto todavía no se ha podido aclarar, indicó Muls.