El gabinete de seguridad, reunido el miércoles durante cinco horas, decidió por unanimidad continuar los ataques contra “objetivos terroristas” de Hamas y las operaciones llevadas a cabo para “neutralizar” los túneles cavados por el movimiento islamista entre la Franja de Gaza y el territorio israelí, indicó la radio pública.
Para este jueves por la tarde está prevista una nueva reunión de este gabinete, integrado por ocho ministros, añadió la radio.
Citado por ésta, un general encargado de las operaciones en el sector del enclave palestino dijo que la destrucción de los túneles sólo sería “cuestión de días”.
Por otra parte, quince palestinos refugiados en una escuela de la ONU del norte de la Franja de Gaza resultaron heridos este jueves en un ataque de la aviación israelí contra una mezquita cercana, según los socorristas.
“Quince palestinos resultaron heridos, dos de ellos, de gravedad, en una escuela del campo de (refugiados) de Jabaliya de la UNRWA (Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos) por esquirlas tras un ataque de la aviación israelí contra una mezquita muy cercana”, precisó Ashraf Al Qudra, portavoz de los servicios de emergencia.
La víspera, al menos 16 palestinos, entre ellos varios niños, murieron en el mismo campo de refugiados tras la explosión de dos obuses israelíes en otra escuela de la UNRWA.
La agencia de la ONU, que utiliza las 83 escuelas que tiene en la Franja para albergar a los civiles que huyen de los combates, denunció el miércoles una “grave violación del derecho internacional” por parte de Israel y exigió que “se rindan cuentas”.
Estados Unidos y la ONU condenaron el miércoles el bombardeo de la escuela de Jabaliya, donde unos tre mil palestinos refugiados confiaban en estar a salvo de las bombas.
Casi mil 400 palestinos han muerto en este nuevo conflicto iniciado el 8 de julio entre en el movimiento islamista Hamás, que controla la Franja de Gaza e Israel. El Estado hebreo perdió, por su parte, a 56 soldados y tres civiles murieron en su territorio.