Con el uso del sistema de posicionamiento global (GPS) , los misiles chinos carecían de la precisión necesaria para lanzar ataques precisos sobre objetivos concretos, pero ahora con el sistema “Brújula” pueden hacerlo, agregó Pi.
Taiwán necesita desarrollar sistemas defensivos para interferir en “los ojos y oídos” del sistema “Beidou” , señaló el profesor de Relaciones Internacionales en la Universidad Chengchi de Taipei Ting Shu-fan.
El sistema chino “Brújula” se une a otros sistema de navegación, tales como el GPS de Estados Unidos, el Glonass de Rusia y el Galileo de la Unión Europea.