Adelantaron su boda luego de los primeros ataques a su país de origen, lo realizaron en el monasterio de San Miguel en la capital de Ucrania, Kiev, mientras las alarmas antiaéreas sonaban a su alrededor.
“Estás en el momento más feliz de tu vida, sales del monasterio y escuchas esas alarmas. Se convierte en algo sumamente aterrador”, comentó la joven pareja en una entrevista concedida para CNN
El conflicto entre Ucrania y Rusia sigue escalando y no parece visualizarse un final cercano ni positivo. Los ciudadanos ucranianos, que muchos de ellos no han tocado un arma en toda su vida, han tenido que aceptar el hecho de ser posiblemente requeridos por las fuerzas armadas ucranianas para pelear por su país.
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Esto es lo que realizó la pareja luego de contraer matrimonio: enlistarse en las Fuerzas de Defensa Territorial de Ucrania, y su luna de miel, lejos de los restaurantes y bonitas vistas de ríos y paisajes, ahora consiste en recoger fusiles y prepararse para pelear.
“Tenemos que proteger nuestro país, a las personas que amamos y a la tierra en la que vivimos, nos sabemos lo que puede ocurrir, pero esperaremos que todo vaya bien”, comentó la pareja.
La pareja, a pesar de mostrar optimismo hacia el futuro ahora que están juntos, también mencionaron el miedo creciente ante la incertidumbre que este conflicto puede causar en sus vidas. “Esperamos que todo se normalice, que tengamos un país nuevamente en paz y sin amenazas de los enemigos”.
Arieva y Fursin llegaron a conocerse en el año 2019 en Kiev y decidieron casarse porque estaban convencidos de haber encontrado al amor de su vida respectivamente, independientemente de los desafíos que llegaran a encontrarse en el camino. “Solo queremos estar juntos, pase lo que pase”, mencionó la pareja.
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