El lanzamiento se postergó en octubre y en noviembre pasados debido a problemas técnicos en la primera etapa rusa y la segunda etapa surcoreana.
El cohete debía mantener una trayectoria de ascenso durante nueve minutos antes de soltar el satélite STSAT-2C, destinado a recoger datos sobre las radiaciones cósmicas durante un año, según responsables del programa espacial surcoreano.