Los gravámenes actuales del 25 % sobre los autos importados a Estados Unidos se mantendrán, pero las nuevas medidas evitarán que otros aranceles que afectan a esa industria, como los del 25 % sobre el acero y el aluminio, se “acumulen” sobre los demás, dijo un funcionario de la Casa Blanca a la cadena NBC News.
La portavoz de la Administración, Karoline Leavitt, adelantó a los medios en la mañana de hoy que Trump firmará este martes una orden ejecutiva relacionada con los aranceles a los automóviles, sin revelar los cambios específicos incluidos en el texto.
La confirmación del alivio arancelario llega luego de que el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, afirmara al canal CNN que el pacto negociado con los fabricantes “representa una gran victoria para la política comercial del presidente (Trump), ya que recompensa a las empresas que fabrican en el país y, al mismo tiempo, da vía libre a los fabricantes que han expresado su compromiso de invertir en EE.UU. y expandir su producción nacional”.
Lutnick no especificó el contenido del acuerdo ni sus condiciones en el comunicado remitido a CNN.
