Lapsus del Anno Dómini
EL HISTORIADOR BEDA El Venerable comenzó a usar el anno dómini, de Dionisio, para datar fechas. Así creó el ante vero incarnationis dominicae tempus (el tiempo antes de la encarnación verdadera del Señor) para referirse a los años anteriores al nacimiento de Jesús y el anno dómini para referirse a los años posteriores. En la actualidad se utiliza nada más a.C. (antes de Cristo) y d.C. (después de Cristo). Carlomagno instituyó la era cristiana en el año de su coronación como emperador que de 1554 a.u.c. pasó a ser el año 800 d.C. Hasta ahí todo iba bien. Sin embargo, Dionisio cometió dos errores graves.
EL PRIMER LAPSUS FUE que no se percató de que cuando definió el 754 como el año 1 de nuestra era determinaba la muerte de Herodes I el Grande, en el año 4 a.C., o sea antes de Cristo. Esa datación significa que el rey judío mandó a degollar a los santos inocentes para acabar con el Mesías cuando ya había fallecido. Herodes en realidad murió en el 750 a.u.c. y la datación cristiana correcta sería el año 2 después del nacimiento de Cristo, y no el año 4 antes del nacimiento de Cristo, como está oficialmente definido. Según los cálculos, Jesús en realidad habría nacido hacia el 748 a.u.c. y no en el 753 a.u.c., como supuso Dionisio. Si eso fuera acertado, ahora no estaríamos en vísperas del año 2015, sino del 2020.
PERO EL LAPSUS MÁS GRAVE fue que Dionisio no estableció el año cero de la era cristiana. ¿Cuál es el impacto de ese pequeño error? Muy sencillo, Jesús nació antes de Jesús. Dionisio olvidó el año cero, o sea cuando Jesús estaba en el vientre de María, y debió contar el año 1 a partir de su nacimiento, el 25 de diciembre, o en su defecto, el día de la circuncisión, el 1 de enero. El monje definió un calendario que saltó directamente del año 1 antes de Cristo al año 1 después de Cristo. Por esa razón, el nacimiento de Jesús, según Dionisio, ocurrió el año 1 antes de Cristo. Pero bueno, esos son gajes religiosos porque la Iglesia Católica, conociendo ese error, nunca lo enmendó y así ha pasado por los siglos de los siglos, amén. Claro, esta explicación en nada variará nuestra costumbre de degustar las 12 uvas a partir del primer segundo del 2015 porque representan nuestros deseos de un mejor futuro.
@hshetemul