MIRADOR

Estrategia de confrontación

Desde hace dos semanas se vislumbra una estrategia de confrontación con intención evidente y urgente de acoso y derribo. La inició el presidente Morales cuando reconoció —veinte meses después— que un allanamiento a la SAAS había sido una “amenaza a la seguridad nacional”. No se quién le hizo tan fina apreciación y ocurrente análisis, pero debió destituirlo inmediatamente, por torpe. Veinte meses para determinar una amenaza ilustra la calidad técnico-profesional, la agudeza, perspicacia y sutileza del Sherlock Holmes chapín. El martes siguiente de tan indecible hallazgo, el ministro de Gobernación hizo pública una carta al comisionado de la Cicig pidiéndole explicación de una supuesta investigación en su condominio. El despabilado ministro reveló en la misiva su domicilio y puso en grave riesgo la vida de los agentes que indagaban, a quiénes identificó con nombre, apellido y DPI, así como el vehículo que utilizaban. ¡Vaya lumbrera de la seguridad quien nos cuida! El miércoles, un individuo insultó al presidente y llamó poderosamente la atención de propios y extraños ¿Fue algo preparado? porque del personaje no se ha vuelto a saber más. Jueves y viernes el caso Bitkov subió la atención y, a través de redes y otros medios, quienes condenan la injerencia extranjera en Guatemala encontraron la defensa en Estados Unidos (extranjero) de unos rusos (extranjeros) que habían adquirido y utilizado —reiterada y conscientemente— documentos de identificación falsos ¡Vaya club de agitadores sociales incongruentes y el papel de la geopolítica y del lobby internacional!

El fallecimiento del alcalde Arzú calmó las aguas el fin de semana y posiblemente detuvo alguna acción planificada. Sin embargo, el miércoles pasado los vendedores de La Terminal se manifestaron con la excusa de que las protestas de Codeca les generaban pérdidas, pero con mantas y discursos de apoyo al presidente ¡Admirable ese doble juego! El jueves, fue el oportunista sindicato magisterial encabezado por un tétrico y oportunista personaje —protegido por damas— que ha apoyado tenebrosamente a todos los gobiernos y obtenido a cambio pactos onerosos que pagamos los demás. ¡Alerta Cicig con los poderes paralelos! Y el sábado, un exiguo grupito de personas que piden la salida de la Cicig, también protestó.

Noam Chomsky lo denominó “problema-reacción-solución”: genere el problema y luego ofrezca la solución, y es precisamente la estrategia diseñada por “los pensantes”. La idea básica es mostrar —aunque no demostrar— que hay desorden y caos, que la prensa está alineada y malinforma y el apoyo al presidente, quien ostenta la legitimidad gubernamental, es masivo. Por tanto, es preciso actuar con todos los medios disponibles, y mejor si se acude a la ley de orden público que permite excepciones en situaciones extremas, como las que crean. Esa, y no otra, es la razón para llevar la discusión al Consejo Nacional de Seguridad, grupo en el que planifican y toman decisiones acordes con la ficticia situación. De esa cuenta, han fijado la próxima reunión inmediatamente después de que tome posesión la nueva fiscal general y nombren a un nuevo PGN que les avale y legalice el necesario andamiaje para acuerpar la estupidez estratégica que elaboren para salvaguardar la seguridad nacional.

El presidente le ha copiado el estilo a Codeca: se manifiesta y bloquea, y sus discursos destilan confrontación y odio. Como muestra, la referencia que hizo sobre los comunicadores, que según él: “pueden estar perdiendo la realidad de Guatemala” ¡A saber quién anda perdido! En cualquier caso: aquel que siembra vientos, recoge tempestades, por si el refrán le sirve al ilustre servidor público.

Mejor tienda puentes de diálogo, dispone de una magnífica oportunidad y puede ser la última.

ESCRITO POR:

Pedro Trujillo

Doctor en Paz y Seguridad Internacional. Profesor universitario y analista en medios de comunicación sobre temas de política, relaciones internacionales y seguridad y defensa.