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Uri Levine, cofundador de Waze: “Cada persona debe elegir y trabajar desde el problema que más le apasione”

El emprendedor y cofundador de Waze conversa acerca del valor de los “grandes problemas” y los desafíos en el desarrollo de proyectos disruptivos.

Uri Levine, cofundador de Waze: “Cada persona debe elegir y trabajar desde el problema que más le apasione”

Uri Levine fue cofundador de Waze, la aplicación de navegación y tráfico de conducción basada en la comunidad más grande del mundo. (Foto Prensa Libre: Cortesía KIO Networks)

Hace 15 años, mientras el empresario Uri Levine viajaba por el norte de Israel, logró entender que el tráfico vehicular, más allá de ser esa habitual molestia, podía convertirse en el origen de un proyecto para facilitarle la vida a las personas.

Luego de preguntarle a otros acompañantes del viaje cómo estaba el camino de regreso, Levine imaginó la posibilidad de tener esa respuesta gracias a una aplicación que pudiera monitorear los tiempos en el tráfico. Y así fue como nació Waze, plataforma que en la actualidad reúne a más de 250 millones de conductores en todo el mundo y que fue adquirida por Google en junio de 2013 por más de $1,1 mil millones.

Años después de haber accionado desde la plataforma, el empresario comenzó una ruta desde la cual ha querido acercarse a nuevas audiencias inspirándolas a interrumpir los mercados ineficientes y a mejorar los servicios que estos puedan dar. Su consigna es la de resolver “grandes problemas” y brindar un valor a distintas comunidades.

De esa cuenta, Uri se ha convertido en cofundador, presidente y miembro de distintas juntas directivas en empresas pequeñas con potencial innovador -o startups– alrededor del mundo.

Luego de su participación el 28 de octubre de este año en el foro digital de tomadores de decisión Think & Transform, organizado por la empresa de telecomunicaciones KIO Networks, Uri Levine conversó con Prensa Libre a propósito de los desafíos en el desarrollo de proyectos transformadores, el valor de la innovación en las comunidades y los orígenes de la aplicación Waze.

 ¿Cómo surgió la idea de Waze?

En 2006 estaba de vacaciones con otras familias en la parte norte de Israel. Después de un fin de semana debíamos regresar a Tel Aviv y algunas personas se habían ido antes. Mientras iban en la ruta comencé a llamarlas para saber cómo estaba el tráfico.

Me percaté que eso algo necesario: el tener información de alguien o algo que estuviera delante en la carretera que pudiera decirme qué ocurría. Todo comenzó con la idea de ayudar que los conductores evitaran atrasos, y entonces Waze se convirtió en una comunidad de conductores y para conductores.

Para Levine el empoderamiento surge desde el encuentro con un problema y una pasión. (Foto Prensa Libre: Cortesía KIO Networks)

A su consideración, ¿qué define un acontecimiento disruptivo en el mercado?

Ser disruptivo es cuando cambiamos el comportamiento y el equilibrio del mercado luego de preguntarse qué ha habido antes. Han existido mapas de papel y sistemas de navegación por los cuales hemos pagado, pero luego vino Waze; lo introdujimos, y se volvió gratuito. Creo que eso es en parte una disrupción del mercado. Nadie puede competir con algo gratuito y menos si es lo suficientemente bueno.

Ser disruptivo implica una pasión por el cambio. Quienes lo provocan no tienen miedo a fallar y, por lo tanto, están dispuestos a emprender un viaje de fracasos. La pasión es el combustible de esa ruta y los obstáculos son el miedo al fracaso.

¿Qué o quién debería medir qué es el éxito y el fracaso en el desarrollo de un proyecto?

Diría que si una empresa resulta de generar valor para las personas y hay quienes pueden ganarse la vida así, entonces es un éxito.

El éxito significa el valor que se le da a los demás e inicia con preguntas como ¿Puedo hacer un impacto? ¿Puedo cambiar el mundo? ¿Puedo crear valor? Si la respuesta es sí, entonces debería de buscarse cómo llegar ahí.

Ser disruptivo implica una pasión por el cambio. Quienes lo provocan no tienen miedo a fallar. -Uli Levine, emprendedor y desarrollador.

Más allá de la pasión o la búsqueda de las rutas para provocar un valor, ¿qué facultades cree debe tomar en cuenta un emprendedor en la realización de cualquier proyecto?

Deben recordar que no están construyendo un proyecto o una start-up para sí mismas, sino con el fin de crear valor para otras personas que serán los clientes o consumidores.

“La construcción de una empresa puede ser un viaje con fallas”, dice el emprendedor Uli Levine. (Foto Prensa Libre: Cortesía KIO Networks)

La construcción de una empresa puede ser un viaje con fallas, por lo que se podría pensar también en la posibilidad de tener más éxito al fallar más rápido porque entonces habrá tiempo suficiente para probar muchas cosas.

Otro detalle importante es empezar con un gran problema. Se debe pensar en algo que valga la pena resolver. Luego se debe preguntar quiénes más tienen ese problema. Ahora, si muchas personas lo comparten, es razonable ir con ellas, hablarles y comprender su percepción de la problemática. Solo así podrá ubicarse una solución. Es fundamental comprometerse con las personas.

¿Qué importancia tienen esos “grandes problemas” que menciona?

Cada persona necesita elegir el problema que más le apasione y el que cree que pueda resolver para sentir que realmente habrá un impacto.

En Guatemala, hay grandes brechas sociales. ¿Cómo cree que la tecnología puede ser un transformador social, teniendo en cuenta que no todo el mundo puede acceder a productos tecnológicos?

Si esto se trata de un problema, vale la pena abordarlo. Es algo que debe tomarse a consideración ya sea local o globalmente.

ESCRITO POR:

Alejandro Ortiz

Periodista de Prensa Libre especializado en temas sobre cultura y bienestar, con 5 años de experiencia.