Escenario

Por qué se pintan las paredes del Palacio Nacional de amarillo

Algunos muros del Palacio Nacional de la Cultura fueron pintados de amarillo, sorprendiendo a algunas personas. 

Los trabajos de restauración del Palacio Nacional de la Cultura, que se llevarán a cabo durante el 2018 y, se espera, concluyan en 2019, son parte de los esfuerzos por reparar secciones dañadas de la estructura.

Dentro de esas reparaciones se encuentra la fachada, la terraza y demás áreas externas del edificio, que no recibieron el tratamiento correspondiente y con el paso de los años, además de eventos naturales como sismos, se han desgastado.

Una de esas restauraciones es la de los muros que se encuentran en las partes aledañas a los patios internos, que fueron pintadas de color amarillo.

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Esa decisión responde al hallazgo que hizo el equipo de restauración en el que, al limpiar esas paredes, descubrieron que el mostaza era su color original.

“La intención del proyecto de rescate es conservar la estructura”, dijo Luis Felipe Cuyán, maestro de obras, a la Revista D.

El Ministerio de Cultura y Deportes invertirá alrededor de Q40 millones para completar las dos fases de trabajo, según dijo el titular de esa cartera, José Luis Chea Urruela.

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Curiosidades:

Cuyán, maestro de obras, comentó que al reparar las fisuras del Salón de Recepciones, quedaron expuestos unos ladrillos. Antes de volverlos a cubrir con repello y pintura, los restauradores advirtieron que tenían marcas, al verlas detenidamente reconocieron que eran esvásticas, el símbolo utilizado por los nazis. El edificio fue construido en la época en que Jorge Ubico fue presidente y él simpatizó con la Alemania Nazi.

Según Jose Luis Chea Urruela, ministro de Cultura y Deportes, la restauración del Palacio durará el resto del año y parte del 2019.  La cartera a su cargo ha erogado Q10 millones de los Q23 millones de la primera fase del plan.  El costo total roza los Q40 millones.

Daños por sismos del 14  y 22 de junio del 2017

Salón de Recepciones: se localizaron fizuras cerca de la cúpula, y tres de sus esquinas muestran fallas por torsión en los capiteles de las columnas. También hay grietas que atraviesan el salón de este a oeste, y en los vitrales 2 y 6.
Azotea: en el torreón central, en el ala oeste de dicha fachada existe una separación entre 10 y 12 milímetros. Entre los arcos 1 y 2 de sur a norte del segundo piso, existe una grieta en la fachada oeste del Patio de La Paz. Hay otra horizontal en la cornisa del tercer piso de la fachada oeste, y con otro sismo corre el riesgo de desprenderse.
Segundo piso: en la Sala 16 del segundo piso, Patio de La Cultura ala sur, se evidenció que el muro de la sala manifiesta un agrietamiento en la parte oriental del vano de la ventana —espacio sin construcción—.
Fuga de agua: a nivel del piso y en la base del muro norte del servicio sanitario para hombres en el primer nivel en el Patio de la Cultura ala este. También en el baño ubicado en el área sur oeste del segundo piso del mismo patio. Postes
Poste de iluminación del Palacio: localizado sobre la 6a. calle, ubicado en la esquina sureste del edificio, se corrió casi 15 centímetros de su base, en con el primer sismo. Con el segundo temblor se corrieron otros dos de su lugar.
Además, existen desprendimientos de elementos arquitectónicos que ya manifestaban un deterioro y con los sismos se desprendieron elementos de concreto.

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