Kim Ki-duk protagonizó un momento de gran emoción cuando se puso a cantar una canción en coreano en el escenario del Palacio del Cine de Venecia, acompañado por la intérprete principal de la película Cho Min-soo, una interpretación recompensada con grandes aplausos.
El cineasta de 51 años, cuyas películas participan con frecuencia en los festivales europeos de más prestigio, ya se llevó el León de Plata en Venecia en el 2004 al mejor realizador por su película Bin-jip.