Este mal generalizado ha sido recientemente confirmado por investigaciones periodísticas aparecidas aquí en Prensa Libre, dando cuenta de los niveles escandalosos de endeudamiento del guatemalteco con las tarjetas de crédito, bancos del sistema, inmobiliarias, ventas de electrodomésticos, etc.

Dicho endeudamiento, además de hacerles perder dinero por destinarlo al pago de intereses, también les hace perder la paz y tranquilidad personal y la armonía en sus matrimonios. En el caso de los colaboradores de las instituciones y empresas, les hace trabajar con desánimo y su eficiencia operativa se ve disminuida en desmedro de la organización para la cual laboran. Además, por la cantidad de ingresos destinados mensualmente a pagarles a sus acreedores. les queda muy poco dinero y no les alcanza para cubrir el resto de gastos y compromisos.

En mi tarea de coach me he enfrentado a verdaderos dramas que están viviendo tanto solteros como casados, que piden orientación o consejería personalizada o bien asisten a nuestras capacitaciones grupales. Casos complicados, porque adicionalmente al endeudamiento que les ahoga, especialmente con tarjeta de crédito, cuyos saldos crecen por los intereses que les cobran más allá del interés bancario de ley, también enfrentan otros problemas, como desempleo o enfermedades crónicas, que ameritan desembolsos considerables para la compra de medicamentos caros, por lo cual viven con ansiedad, estrés, desánimo y desmotivación.

Pero si estás pasando por una situación difícil por tu endeudamiento me gustaría compartirte cuatro medidas prácticas que te pueden ayudar a pagar poco a poco a quienes les debes, hasta salir totalmente de deudas. Para agenciarte de dinero extra para pagar lo adeudado a los acreedores, te aconsejo seguir la siguiente fórmula: primero, busca otras fuentes de ingresos aparte de las que ya tienes, tales como venta de seguros, productos por catálogo o multiniveles, actividades de fin de semana o fuera de horas de tu trabajo regular. Segundo, vende lo que en casa tienes en buen estado pero ya nadie lo usa, a nadie le sirve, ya no lo aprovechan o no les trae algún beneficio.

Tercero, disminuye tu nivel de gasto; es decir, sacrifica algunos gustos, como salir a comer fuera seguido o a divertirte con amigos, ir al cine, etc. En otras palabras, mientras dure la crisis debes apretarte el cinturón. Cuarto, todo ingreso adicional al salario regular, como el bono 14 y el aguinaldo, o bien las entradas extras en los meses de vacas gordas en la empresa o profesión, también destínalas al pago o abono de deudas.

La meta más importante a alcanzar para mis alumnos, si quieren llevar su economía a otro nivel, es, antes que nada, liberarse de sus deudas con esta fórmula. ¡Y el resultado ha sido fabuloso!

Claro que todo el proceso de pagar deudas requiere no solo de esfuerzo, sino también de paciencia y perseverancia, pues toma tiempo hasta terminar de pagar el último centavo a cada uno de los acreedores. No debes ceder nunca en tu empeño, sino mantenerte enfocado en la tarea de pagar hasta la última deuda. No escuches las voces negativas ni dejes que ningún pensamiento de duda gane la batalla en tu mente.

En la ruta a la libertad de las deudas ayuda mucho tener una fe absoluta en que Dios nos extenderá su mano en todo el trayecto. Eso nos mantendrá con esperanza para no decaer hasta llegar al final del túnel, del cual un día saldrás en victoria.

En mi libro “Cómo Hacerla en la Vida”, conocerás más sobre este y diversos temas financieros de interés.