Conrado Monroy, asesor jurídico de la Asociación Nacional de Municipalidades (Anam), señaló que las líneas de trabajo de los jefes ediles deben girar en torno a promover la transparencia, acelerar la construcción de plantas de tratamiento de aguas residuales —que tiene como fecha límite julio de 2017— y la protección de los bosques.
Otros desafíos serán establecer un trabajo genuino con los consejos comunitarios de Desarrollo, promover la seguridad alimentaria y nutricional e implementar políticas de prevención de la violencia, agregó.
De acuerdo con la experiencia de los últimos cuatro años, una de las principales dificultades que podrían enfrentar los nuevos alcaldes será el incumplimiento del aporte constitucional, que según Monroy, en el 2015 fue de Q532.5 millones al mes —Q6 mil millones 390, proyectado al año—. Para el 2016, el aporte mensual debe ser de Q532 millones. Los consejos departamentales de Desarrollo destinan Q1 mil 825 millones al año para las comunas.
El aporte es dividido entre las 338 municipalidades, basado en un estudio que desarrolla la Comisión del Cálculo Matemático, integrada por representantes de la Secretaría de Planificación y Programación de la Presidencia, la Asociación Guatemalteca de Alcaldes y Autoridades Indígenas, el Ministerio de Finanzas Públicas y la Anam.
El año recién finalizado, el Estado incumplió con el pago de Q1 mil 120 millones, aproximadamente, lo que significa que la gestión de los nuevos jefes ediles podría comenzar con deudas de arrastres, obras inconclusas y grandes problemas para gestar proyectos de servicio básico, como agua entubada y saneamiento ambiental.
Monroy señaló que la poca recaudación tributaria local también impactará en los nuevos gobiernos municipales.
Proyectos ineludibles
Un sondeo efectuado con los alcaldes electos de las cabeceras departamentales determinó que la mayoría coincide en que sus prioridades son proyectos de agua entubada, saneamiento ambiental y de las finanzas e infraestructura.
En Quetzaltenango, la segunda ciudad más grande del país y cuyos pobladores padecen por desorden vial, falta de buses, inundaciones e inseguridad, el alcalde electo, Luis Grijalva, aseguró que entre sus planes está contrarrestar algunos de esos problemas.
Señaló que sus primeros pasos los dará con el saneamiento de las finanzas y negociar la deuda de la Empresa Eléctrica Municipal con el Instituto Nacional de Electrificación, que asciende a Q1 mil 200 millones.
“Se debe fortalecer la procuraduría de cobros, que hasta ahora ha sido inoperante porque no cumple su función, por falta de apoyo del Concejo”, expresó Grijalva, quien reemplazará a Jorge Barrientos.
Donald Urízar, del Colectivo Vos, indicó que unos de los mayores problemas en la comuna de Xela han sido la corrupción y la impunidad. Además, refirió que es urgente plantear, socializar y aprobar el Plan de Ordenamiento
Territorial.
En Escuintla, otra de las ciudades grandes y que afronta problemas de urbanización y desabastecimiento de agua, el control de la comuna será tomado por el exdiputado Abraham Rivera, quien debe trabajar en un plan de urbanización acorde a las necesidades de la población.
En su plan de trabajo, Rivera tiene como prioridad mejorar el abastecimiento de agua entubada, ya que, según indicó, el 80 por ciento de los hogares no cuenta con ese servicio. Otra de sus metas está enfocada en mejorar las calles e implementar un sistema de drenajes más eficiente y el tratamiento de desechos, para contrarrestar la contaminación de los ríos.
Recuperar credibilidad
Otro lugar afectado por el desorden y la corrupción es Antigua Guatemala, Sacatepéquez, considerado uno de los destinos turísticos más importantes del país.
Susana Asensio, alcaldesa electa, aseguró que trabajará por el desarrollo de la ciudad y su primer cometido será recuperar la credibilidad de la población hacia la administración municipal, la cual fue golpeada por la salida del alcalde Adolfo Vivar, detenido en el 2012, señalado de fraude, concusión y lavado de dinero.
Aunque el plan de Asensio se basa en fortalecer los servicios básicos, unas de sus prioridades son normar el consumo de bebidas alcohólicas en la vía pública y regular el sonido en bares y discotecas. “Buscaremos recuperar la tranquilidad de los antigüeños”, expresó.
Otto García, presidente de la Cámara de Comercio filial Sacatepéquez, señaló que están a la expectativa de la nueva corporación municipal y sus prioridades; sin embargo, como sector empresarial les preocupa la inseguridad que azota el lugar y esperarían que se replanteran estrategias para contrarrestarla.
En Cobán, Alta Verapaz, Jorge Córdova llega a la silla edilicia en sustitución de Leonel Chacón, quien estuvo durante dos periodos al frente de esa comuna.
Córdova plantea una auditoría forense de las obras, similar propuesta de Gerónimo Martínez, que dirigirá los destinos de la cabecera de Huehuetenango, y considera que recibe la comuna en la “peor crisis”.
Desconocen prioridades
Así como hubo jefes ediles que compartieron su visión de gobierno, también hubo quienes manifestaron que desconocen su papel y su compromiso al frente de la comuna, como expresó Gabriel López, alcalde electo de San Marcos, y Julio Sánchez, de Zacapa, que se negó a brindar información.
La Comisión de Asuntos Municipales del Congreso tiene como reto consensuar el proyecto de iniciativa de ley de Servicio Municipal, que regularía el despido masivo de empleados que ocurre cada cuatro años.
Sugiere auditoría
Durante un Diálogo Libre de Prensa Libre, en octubre último, Eduardo Velásquez Carrera, del Centro de Estudios Urbanos y Regionales, recomendó a los nuevos alcaldes exigir una auditoría desde el comienzo de su gestión y que la Contraloría General de Cuentas (CGC) rinda un informe.
Según Carrera, es difícil garantizar la transparencia en el manejo de los fondos en las comunas si la CGC no cumple con su trabajo.
Apeló a la voluntad de cada uno de los alcaldes electos para dirigir por el buen camino los destinos de sus comunidades. “Hay gente que tiene conocimiento por experiencia; hay gente honesta, cada vez menos, pero hay. Ellos pueden ser buenos alcaldes atendiendo las necesidades de la población”, enfatizó.
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En octubre último, Velásquez Carrera pidió a los jefes ediles electos a que exijan auditorías para una gestión con transparencia.
