Vecinos relataron que las víctimas murieron soterradas entre lodo y piedras que descendió luego de desprenderse parte de una montaña en la referida comunidad.

“Gracias a la intervención de los pobladores se logró rescatar a cinco personas con vida”, indicó Jorge Méndez, de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred), que atendió la emergencia.

Miguel Luis Pérez, presidente del Consejo Comunitario de Desarrollo, detalló que la tarde del lunes comenzó a llover y no paró hasta las 22 horas, minutos más tarde corrió la noticia de la tragedia luego de destruirse dos viviendas, una carretera y daños en un puente peatonal.

Quien llevó la peor parte fue Julián Luis Velásquez, quien perdió a su esposa, nieta y suegro, debido a un derrame parcial en la cara no pudo hacer nada para salvarle la vida a sus parientes.

“Hay luto en la comunidad nunca imaginamos vivir esta tragedia”, dijo Velásquez en breves declaraciones.

Según Pérez, los vecinos organizados han dado asistencia inmediata, sin embargo se necesita ayuda pues la familia porque es de escasos recursos y no tienen medios para comprar los féretros para las víctimas mortales.

Aparte necesitan que se les apoye con materiales para la reconstrucción de su vivienda puesto que prácticamente quedó destruida debido al deslave. “Nos sentimos tristes porque el río causó estragos en nuestra comunidad”, indicó.

Crisanto Jiménez, un vecino, indicó que los caseríos Aguacatillo, Tui nilaj, Tzuicantzu y Tui jaxin quedaron incomunicados, ya que el riachuelo conocido como el Aguacatillo se llevó parte de la carretera.

Agregó que les preocupa porque más de un mil personas no tienen acceso vehicular y el paso peatonal esta dañado por la correntada.