Guatemala

Violencia provoca psicosis y estrés

La violencia extrema, que se incrementó desde hace una semana, ha creado un mayor nivel de psicosis colectiva que se manifiesta en estrés y nerviosismo, y que puede llegar a afectar el sistema inmunológico de las personas. (En el espacio de los comentarios opine sobre cómo la violencia afecta en su vida cotidiana)

Especialistas entrevistados expresaron que la criminalidad ha modificado los hábitos de las personas, quienes temen salir a la calle para no ser objeto de ataques violentos.

Luis Carlos De León, psicólogo del Instituto de la Defensa Pública Penal, indicó que la predisposición de alerta significa que la gente teme que le pueda pasar algo malo, lo cual es parte del imaginario colectivo.

Ejemplificó que los usuarios del transporte urbano ya no se sientan atrás del piloto, por temor a ser blanco de las balas. También se mantienen atentos de quién sube y baja del bus, con miedo a ser asaltados.

Quienes conducen sus automóviles entran en pánico cuando se acerca algún motorista, por temor a ser víctimas de un hecho criminal.

“Al conducir, las personas creen que cualquier motociclista es un peligro, y la tranquilidad vuelve hasta que son rebasados”, resaltó De León.

Enfermedades

“La inseguridad genera niveles altos de estrés y una psicosis permanente que puede terminar en enfermedades serias en el sistema inmunológico”, resaltó el psicólogo.

Cada vez hay más pacientes por problemas asociados con la inseguridad.

Este flagelo provoca que los padres de familia sometan a sus hijos a un maltrato no deliberado, y para evitar que sean víctimas de la inseguridad no dejan que jueguen en la calle ni en otros espacios abiertos.

“Hay un cambio en la conducta de los más pequeños, que están siendo obligados a permanecer encerrados en sus viviendas”, explicó el profesional.

Las personas, en la actualidad, se preocupan más por la violencia que por el desarrollo de sus actividades sociales y culturales.

Encerrados

David Martínez Amador, especialista en criminalística, indicó que los habitantes evitan cada vez más salir a las calles.

Agregó que los centros comerciales se han convertido en los únicos lugares donde la gente se siente segura, mientras que visitan menos los centros nocturnos.

“Ahora las fiestas se organizan en la residencia de un amigo; nos escondemos para no ser víctimas de la inseguridad”, resaltó.

Martínez Amador señaló que el clima de inseguridad no solo lo genera el crimen organizado, ya que la falta de acción de las autoridades causa incertidumbre y temor en la población.

José Dávila, analista político, expresó que esta situación es una herencia que dejó la guerra interna que vivió el país durante 36 años. No descartó que tras las acciones violentas puedan estar algunos partidos políticos interesados en crear un clima de zozobra e inseguridad.