Comunitario

“El ahorro es importante”

Hace tres décadas Julio Suárez tomó una decisión que definiría su futuro profesional: dejó la carrera de Administración de Empresas y se embarcó en el estudio de la Economía, lo que le permitió alcanzar la presidencia del Banco de Guatemala (Banguat) y de  la Junta Monetaria. 

Suárez, quien  dirige desde el  1 de octubre último   los hilos de la política económica del país,   aseguró  que en ningún momento  pasó por su mente ocupar ese puesto.

 Sus inicios  en el Banguat  se remontan a 1979, cuando su tarea era vigilar el ingreso de personal y el pago de planillas.

 Es el quinto de seis hermanos y recuerda  su infancia cuando salía a “barranquear” en la colonia Atlántida, zona 18, donde creció y cursó la  primaria.

También rememora  sus estudios en el Instituto Rafael Aqueche y la Escuela Nacional Central de Ciencias Comerciales de donde se graduó  de  diversificado.

El momento más difícil, refirió, fue en el 2006 tras la escasez de papel moneda en el mercado, las intervenciones de bancos del sistema y los efectos de la crisis global en el 2008.

Se suele decir que los banqueros son muy  tacaños. ¿Por qué razón?

En toda sociedad se debe   impulsar  el ahorro porque es importante, y esa práctica hay que inculcarla desde la niñez, para enfrentar los momentos de crisis.  Esa reserva siempre es útil para afrontar  las  debacles  y por esas circunstancias se denomina así a algunos banqueros.
¿Qué recuerda de su infancia?

Crecí en la colonia Atlántida, zona 18,  y en la zona 1. Recuerdo de la primaria a los profesores  Graciela Flores de Tercero, Sonia Gudiel y  Luis Navarro,  que forjaron mi preparación primaria, sobre todo al inculcarme valores.  

La oportunidad de crecer en ese barrio del norte de la Ciudad  permitió compartir con los vecinos del sector las áreas poco habitadas y era muy común salir a “barranquear” e ir  a las montañas del sector para cortar   guayabas y nísperos.

¿Dónde estudió?

La primaria en la escuela Felisa Soto Montenegro, zona 18 (1966-1971), la secundaria en el Instituto Rafael Aqueche (1972-1974)  y el diversificado en la Escuela Nacional Central de Ciencias Comerciales (1975-1977).

¿Qué travesura recuerda de su infancia?

Para la Semana Santa o vacaciones viajábamos a Puerto Barrios y con uno de mis primos salíamos en un cayuco al mar. Cuando mi mamá se enteró que estábamos cerca de la boya donde comienza el mar abierto, se asustó. Yo tenía 12 años.  

¿Cuál fue su primer paso en el Banguat?

Empecé a trabajar el 25 de junio de 1979, previamente  había estado en la empresa de alimentos Kerns de Guatemala,  en la ruta al Atlántico. 

Ingresé  al Departamento de Personal  como encargado de tomar   la asistencia y llevar el control de la  puntualidad. Cuando alguno incumplía con el horario  me correspondía preparar las amonestaciones para los colegas.

 ¿Cuál fue su primer cheque?

En el Banguat me pagaron Q285 y era mucho dinero en relación a los Q175 que recibía en la otra empresa.

¿Cómo fue su trayectoria como técnico?

Fui analista de cuentas nacionales del Departamento de Estudios Económicos y estuve a cargo de los análisis del sector financiero y servicios,
y una serie de cargos en esa área.

Estudiaba la carrera de Administración de Empresas en la Universidad de San Carlos de Guatemala (Usac),  y al cerrar el área común, decidí optar por Economía,  en 1983.

Uno de los deseos de los estudiantes de Economía era poder llegar a ese departamento, porque era donde se realizaba el análisis de la  macroeconomía —estudio de la economía y sus  variables—.

¿En su mente pasó que alguna vez sería presidente  del Banguat?

Para hacerle honesto no. En principio estaba estudiando Administración de Empresas; sin embargo, tuve la oportunidad de conocer a guías  que fueron despertando el interés por estudiar Economía, como   Roberto Cordón.    

En los años de 1990 vino a la presidencia del Banguat   Federico Linares, quien  traía un impulso para implementar un plan de ajuste de estabilización y   fomentó en mí ese  estudio.

En ese tiempo se trabajaba intensamente para contribuir a moderar los efectos de la inflación que en ese año llegó  al 60 por ciento; nos dio la posibilidad de trabajar y dar más;   pero pensar en dirigir la institución como tal, nunca  pasó por mi mente.

¿Cuáles son  sus pensadores económicos favoritos?

Hay diferentes personalidades, pero los referentes son Milton Friedman, John Kenneth Galbraith,  Roberth Mundell y  Carmen Reinhart, entre otros, que  dentro de la manera de ver la economía tienen planteamientos interesantes.

Estudié en la Usac y leía a otros que tienen una orientación socialista, pero lo importante no es tanto qué tipo de pensamiento o escuela se conoce, sino cómo se pueden    conjugar los diferentes elementos de pensamiento para tratar de aplicar cada uno de ellos dentro de los análisis que se hacen y las propuestas que en  algún momento se tienen que hacer.

¿Qué  teoría económica se aplica para Guatemala?

La Constitución establece ciertas garantías  y la econo mía se sustenta en el principio de la propiedad privada, y eso quiere decir que se respeta la propiedad privada y las decisiones de mercado.

Tenemos un Estado que es regulador de ciertas actividades y, por lo  tanto, hay una combinación de formas de pensamiento garantizadas dentro de la misma Carta Magna. En la práctica vemos diferentes formas de pensamiento.

¿Cuándo fue la última vez que cotejó precios en el mercado?

Fue en 1987 y en bus urbano. Íbamos a cotejar precios en los mercados de la zona 6, Mixco y Villa Nueva. Ahora con mi esposa voy al supermercado y veo si están de acuerdo con  los que se verifican en el Banguat.

Hoja de vida -Es economista  egresado de la Usac-

Ha ocupado  en tres ocasiones la   Vicepresidencia del Banguat y de la Junta Monetaria.

Fungió  como  asesor principal en el Ministerio de Finanzas.

Fue   representante  de los países centroamericanos en el  el Directorio del Fondo Monetario Internacional en Washington DC.

Laboró  para el Banco Centroamericano de Integración Económica.

Respuestas Rápidas

Pobreza: tristeza

Deuda:  desorden

Quetzal:  símbolo monetario fuerte

Junta Monetaria:  foro colegiado importante

Dios:  el poder sobrenatural

Karl Marx:  economista con preocupación sobre equidad

Wall Street:   mercado especulativo

RCrisis:   momento de búsqueda de oportunidades .

decisiones en política monetaria – Momentos  difíciles –

Aunque ha pasado las más variadas vicisitudes, Suárez dijo  que entre las más difíciles estuvieron  el fallecimiento de su madre, en 1981, y de  su padre, en el 2004.

 En el campo laboral  fueron  las intervenciones de Banco del Café, la escasez de papel moneda en  el 2006 y la intervención del Banco de Comercio en

el 2007.  “La falta de papel moneda no ameritaba solo mandar a traer dinero. Aprendimos a prepararnos para el futuro.   La experiencia que ganamos fue   ser más precavidos”, afirmó.

Suárez  reconoce que el sistema de pago de la deuda de Guatemala funcionó y la economía no se vio impactada por esa escasez.

Sobre las decisiones de las  intervenciones bancarias, señaló  que se requiere de un temple para poderlas adoptar, pensando en   proteger el ahorro nacional.    “Al adoptar las decisiones a tiempo se pudo  proteger a los depositantes y ninguno se vio impactado. Son decisiones que nadie quiere tomar”, apuntó.

 Aseguró  que la responsabilidad al asumir este tipo de cargos es velar por el ahorro y el cumplimiento de la ley.
 En el 2006, rememoró, comenzó el fenómeno de la crisis  financiera y económica mundial que obligó a entender y mitigar esos efectos.

 “Enfrentábamos el problema de  la estabilidad financiera bancaria,  estabilidad de precios y de   los sistemas de pago de la deuda”, añadió

  Suárez.
  Aun en esas condiciones —planteó—   en Guatemala no hubo deterioro  en los indicadores macroeconómicos y esa situación se pudo manejar de  forma exitosa. “Se analizaron las posibles decisiones en materia de política económica y se adoptaron las menos dañinas para la sociedad”, subrayó.

ESCRITO POR:

Urias Gamarro

Periodista especializado en macroeconomía, finanzas públicas e infraestructura, con 20 años de experiencia en medios radiales, impresos y digitales.