Según el profesional, la muerte del estudiante se debió a un edema cerebral severo irreversible que complicó otros órganos de su cuerpo y terminó con su vida.
“Desde la madrugada de ayer empezó a presentar inestabilidad, la presión arterial dependía de un medicamento para mantener las condiciones adecuadas, pero ya no soportó”, dijo el médico.
Guillén Sosa fue víctima de un balazo que le acertó presuntamente Moisés Monzón Pereira, de 25 años, el jueves último, en la 9a. calle, entre 8a. y 9a. avenidas, zona 1, luego del robo de un celular.
Monzón Pereira murió el sábado último, en el mismo nosocomio, por paro cardiaco, luego de los golpes que recibió cuando una turba lo vapuleó por el ataque contra Guillén Sosa.
Luto y dolor
La tristeza de los compañeros de Guillén Sosa y la confusión de los estudiantes por lo ocurrido eran parte del ambiente que se vivía ayer en el colegio San Sebastián, ubicado en la zona 1.
Sus compañeros de clase y los maestros mostraban en sus rostros tristeza e indignación por la pérdida del líder de la banda del colegio.
Édgar Marroquín, subdirector del establecimiento educativo, refirió que para hoy, a las 10 horas, está programado un homenaje para Guillén Sosa y que las clases están suspendidas hasta mañana. En el plantel se colocó una moña negra y la bandera del colegio ondeaba al viento a media asta, en señal de luto.
Se tiene previsto que a las 13 horas salga el cortejo fúnebre hacia el cementerio Las Flores.