Comunitario

Volcán de Fuego sube intensidad eruptiva

Atemorizados están los pobladores de 40  comunidades de Escuintla,    Sacatepéquez y Chimaltenango,  asentadas en las faldas del Volcán de Fuego, ya que en los últimos días la actividad eruptiva del coloso aumentó y se reportan explosiones intensas y más frecuentes, las cuales son sensibles incluso a varios kilómetros de distancia.

Volcán Fuego. (Foto Prensa Libre: Insivumeh)

Volcán Fuego. (Foto Prensa Libre: Insivumeh)

ESCUINTLA – La Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (Conred) se declaró el martes en alerta institucional, debido a que la actividad   del coloso se intensificó el  domingo recién pasado y desde entonces hay explosiones fuertes y moderadas, que mantienen alarmadas a las comunidades situadas a unos 35 kilómetros del perímetro del volcán.

Un boletín especial del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología (Insivumeh) señala que  la tarde y noche del lunes y la madrugada del martes la actividad volcánica fue mayor.

Añade que el coloso  mantiene explosiones   fuertes y expulsa columnas de ceniza gris a  unos cuatro  mil 500 metros sobre el nivel del mar, que luego se desplaza  a 12 kilómetros en varias direcciones, principalmente al oeste, suroeste y noroeste  de esa cima.

El reporte añade que  están acompañadas de retumbos moderados y fuertes que  generan ondas de choque, sensibles a más de 15 kilómetros y que hacen vibrar  techos y ventanas de casas.

Las comunidades más afectadas son  Ceylán, Rochela, Guadalupe El Zapote y Panimaché, Escuintla; Santa Sofía, Sangre de Cristo, Morelia, y la cabecera de San Pedro Yepocapa, Chimaltenango, y las comunidades La Eminencia y El Porvenir, Sacatepéquez.

Vea la fotogalería: El coloso nuevamente activo

Testimonios

Carlos Telles, vecino de la aldea El Rodeo, Escuintla, señaló que los retumbos se escuchan cada media hora y que tienen una duración de hasta dos minutos. Además, hay movimientos telúricos.

“Las casas tiemblan y tenemos miedo de que si esta actividad volcánica continúa  puedan  ocurrir daños en algunas viviendas”, añadió Telles.

Carmen Godoy, otra pobladora, confirmó que el coloso ha lanzado lava y ceniza en la comunidad Ceylán, así como en  otras localidades, lo cual pone en peligro a la población.

Godoy comentó que les preocupa que la actividad se incremente, puesto que con una erupción fuerte mucha gente correría peligro, debido a que los techos de las casas son de lámina y no soportarían las piedras que lanza el coloso.

Rosa Chacón, encargada de la base de radio de la Conred, en la comunidad La Reina, señaló que en caso de emergencia cuentan con rutas de evacuación señalizadas y que la  población ya conoce cuál es el procedimiento a seguir si fuera necesaria una   evacuación.

La mayoría de comunidades que están en más  riesgo por una erupción deben  pasar  por tres y cuatro  ríos para salir a las rutas de evacuación.

Byron López, de la comunidad Guadalupe El Zapote, manifestó que en los últimos tres años ha cambiado  el patrón eruptivo del coloso, pues ahora la actividad es más fuerte y eso atemoriza a la población.

“Años atrás la actividad había sido solo el lanzamiento de fumarolas, pero ahora los retumbos y lanzamiento de ceniza nos atemorizan”, afirmó Dalila Gómez, de la aldea Trinidad.

La vecina Flor Dávila indicó que en su casa mantiene una bolsa con ropa y algunos alimentos, así como una linterna, para estar preparados en caso de que se dé una evacuación.

Están preparados

César Suárez, delegado de la Conred en  Escuintla, comentó que ayer se hizo un recorrido por las comunidades más cercanas al  coloso para saber la condición de las personas.

Refirió que por el momento   la actividad está dentro de lo normal, pero  si fuera necesario, la población y las autoridades están listas para evacuar a las personas.

Coloso activo

Según el Insivumeh, el Volcán de Fuego es  unos de los colosos  más activos de Guatemala.

En su página de internet, el Instituto registra que este volcán ha tenido más de  60 erupciones desde 1524.

Las explosiones más violentas de este siglo ocurrieron en 1932, 1971 y 1974; y las más recientes,  el 21 de mayo de 1999 y  septiembre del 2012, respectivamente.

20 mil son las personas que viven en las faltas del coloso.

ESCRITO POR: