“En los últimos años los pobladores se han preocupado en la educación de la familia, ya que todos quieren superarse y ser profesionales”, añadió Loarca.
Maynor Ramírez, jefe de la subestación de la Policía Nacional Civil, manifestó que no han tenido mayores problemas; al contrario, su trabajo se concreta en dar acompañamiento a las actividades culturales, deportivas y sociales que la comunidad organiza.
Rodolfo Pérez, alcalde, agregó que el éxito de vivir en un pueblo tranquilo es porque se ha sugerido a los vecinos que se aparten de los vicios y de las malas prácticas, además se apoyan actividades deportivas, sociales y culturales.
Manuel Ujpán, vecino, refirió que las iglesias católica y evangélica tambien han logrado involucrar a sus miembros en trabajos comunitarios.
Cifra
2013 fue un año sin hechos violentos en este municipio.