Un infarto o un derrame cerebral ameritan atención médica inmediata. Las emergencias, pese a la prevención, pueden ocurrir en cualquier momento, por lo que es indispensable estar preparados y saber cómo actuar ante uno de estos imprevistos.

¿Cómo te avisa el cuerpo antes de tener un infarto?

Ninguna persona está exenta de sufrir un infarto. El estilo de vida juega un papel importante, ya que se suman factores nocivos al cuerpo al fumar, llevar una dieta poco saludable, padecer obesidad, no realizar ejercicio, consumir alcohol, padecer de presión arterial alta, diabetes y/o estrés. 

Aunque la edad ideal para para iniciar los chequeos médicos cardiacos es a los 40 años, visita a un especialista de inmediato si presentas los siguientes síntomas:

Cansancio: más relacionado con una fatiga inusual, es uno de los principales indicadores de un inminente ataque al corazón.

Dolor abdominal: dolor en el estómago, náuseas y sensación de estar hinchado, sin una causa aparente. Los dolores abdominales antes de un ataque al corazón suelen tener una naturaleza episódica, disminuyen y luego suelen volver por períodos cortos de tiempo. 

Insomnio: se asocia con un mayor riesgo de ataque cardiaco o de tener un accidente cerebrovascular. Las características del insomnio a menudo incluyen un alto nivel de ansiedad y distracción. 

Dolor de pecho: puede expandirse y dar lugar a sensaciones incómodas en uno o ambos brazos (más a menudo en el izquierdo), la mandíbula inferior, el cuello, los hombros o el estómago. Puede ser de carácter permanente o temporal.

Dificultad para respirar: la disnea o tener problemas para respirar es un síntoma. De la misma manera que ser incapaz de respirar profundamente. Por lo general, es una señal de advertencia de una afección médica.  

Arritmias: aparecen inesperadamente y se revelan de manera diferente: arritmia (latido cardiaco irregular) o taquicardia (aumento de la frecuencia cardiaca). El latido irregular del corazón suele durar entre 1 y 2 minutos. Si no se desvanece, puede sentir mareos y fatiga extrema.

Sudoración excesiva: es una señal de advertencia temprana de un ataque cardiaco. Puede ocurrir en cualquier momento del día o de la noche.

Primeros auxilios 

1. Procure que la persona se siente, descanse y trate de mantener la calma.
2. Afloje cualquier prenda de vestir ajustada.
3. Pregúntele si toma medicamentos para el dolor torácico, alguna enfermedad cardiaca conocida y ayúdele a tomarlos, si es el caso.
4. Llame inmediatamente a Emergencias. 

Ante un derrame cerebral

Para detectar que una persona cercana está experimentando un derrame, primero es importante que sepas qué es. Un derrame cerebral es una afección en la que se detiene el flujo sanguíneo a una parte del cerebro. Cuando esto ocurre, este órgano no puede recibir los nutrientes que necesita y las células comienzan a morir.

Llamar a Emergencias y trasladar al paciente en ambulancia al hospital es la forma más rápida de recibir tratamiento cuando alguien esta sufriendo de un derrame cerebral, ya que su descuido puede causar daños graves al cerebro, provocar discapacidad y también la muerte.

Estrategia Camaleón 

De acuerdo con expertos, si ves estas señales en tus seres queridos, es fundamental que te acerques a un centro médico. Hospital El Pilar maneja una Estrategia Camaleón, que consiste en detectar los siguientes síntomas: 

• Cara, debilidad en la mitad del rostro. 
• Mano, falta de movilidad o debilidad en una mano, brazo o pierna. 
• Lenguaje, dificultad para comunicarte o comprender las comunicaciones. 
• On, dale “on” al teléfono y llama a Emergencias inmediatamente. 

Los tratamientos pueden reducir o contrarrestar las lesiones cerebrales por completo, pero solo si se recibe atención en las primeras horas después que se presentan los síntomas del accidente cerebrovascular.

“Lo importante, sobre todo, es tener un diagnóstico rápido. El tiempo es valioso, ya que por cada minuto que deje de llegar el oxígeno se pierden neuronas y la enfermedad se complica. Es una enfermedad que debe tratarse inmediatamente”, asegura el neurólogo de Hospital El Pilar, José Domingo Barrientos.

Emergencias en los niños

Las emergencias varían con la edad, así como los cuidados. Para los pequeños es importante tomar en cuenta que tanto el equipo como el ambiente deben ser diferentes, con pediatras especializados para atender de manera inmediata a los menores.  Un niño debe ser tratado en la Emergencia de un hospital si:

• Tiene pérdida de conocimiento o no responde cuando se le habla
• Presenta movimientos espasmódicos y rítmicos inusuales y repentinos
• Se incrementa su esfuerzo o dificultad para respirar
• Nota que su piel o labios lucen azules, morados o grises
• Tiene rigidez del cuello o sarpullido con fiebre
• Presenta un dolor severo y persistente