Ayer hubo una caminata que salió a las 9 horas del barrio La Soledad hacia el parque central, donde se celebró una ceremonia maya, una misa y un servicio evangélico, informó el alcalde de Panzós, Jaime Ramírez León.
Estuvo presente la sobreviviente a esa masacre María Maquim, más conocida como Mamá Maquim, quien en q’eqchi’ expresó que se salvó de la masacre, pero perdió a toda su familia y amigos.
“Tuve que viajar a otro lugar para poder sobrevivir”, recordó Maquim, a quien se considera un ícono para los sobrevivientes.
Se hizo un minuto de silencio, a las 12 horas, y después, los cerca de 800 participantes retornaron a sus aldeas Sepur Sarco, Pueblo Viejo, Cahaboncito, Santa María y a la zona urbana de Panzós.
En Cobán se ofició una misa en la catedral, presidida por el sacerdote Jesús Tapuerca, quien recordó a las víctimas de la masacre de Panzós, quienes murieron por haber defendido sus derechos ciudadanos.
“No estuve en ese momento en el Polochic, pero luego trabajé siete años en esa área, y ciertamente las consecuencias de la violencia se notaban fuertemente en el sentimiento de las comunidades afectadas ese 29 de mayo”, dijo el religioso.
Tapuerca manifestó que este suceso violento fue muy duro para los pobladores de ese municipio.
El sacerdote espera que se logre algún día una justicia equitativa para toda la población, y que se dignifique a las víctimas del conflicto armado interno y a sus familiares sobrevivientes, ya que se calcula que fueron más de cien personas las muertas, y solo se han identificado 50.
Ana Xuc, presidenta de la Coordinadora de Sobrevivientes del Conflicto Armado Interno, Alta Verapaz, explicó que esa entidad organizó la conmemoración.