Chimaltenango

Ofician misa en lugar del accidente en San Martín Jilotepeque

Pobladores de Chimaltenango participaron este miércoles en una misa de nueve días en el lugar donde el lunes antepasado un bus de los Transportes San Martineca cayó al barranco en el kilómetro 64 de la ruta entre San Martín Jilotepeque y la cabecera Chimaltenango, el percance dejó  48 muertos.

Un bus extraurbano que se dirigía de San Martín Jilotepeque hacia la capital cayó a un barranco en el kilómetro 64 de la ruta Interamerica. (Foto Prensa Libre: Víctor Chamalé)

Un bus extraurbano que se dirigía de San Martín Jilotepeque hacia la capital cayó a un barranco en el kilómetro 64 de la ruta Interamerica. (Foto Prensa Libre: Víctor Chamalé)

SAN MARTÍN JILOTEPEQUE – La misa fue oficiada por el párroco de San Martín Jilotepeque, Delfino López Calí, quien dijo que están consternados por la tragedia,  y pidió a los presentes estar preparados con Dios para la muerte.

A la actividad asistieron unas tres mil personas entre familiares y vecinos, quienes pidieron por el descanso de las víctimas y consuelo para los familiares.

El vecino Benjamín Hernández dijo que se solidariza con los deudos, y pidió a las autoridades de Gobierno, para que mejoren la carretera y se eviten más tragedias como la ocurrida donde perdieron la vida 48 personas.

Previo a la misa, la imagen de San Martín de Tours, patrono de ese municipio, fue llevada en hombros al lugar del accidente, luego fue trasladada a la orilla de la carretera, de donde cayó el bus, donde los asistentes develarán una placa con el nombre de las víctimas.

El lunes último se reportó en el Hospital General San Juan de Dios de la capital, la muerte de otras dos personas víctimas del accidente.

MULTIMEDIA: Vea detalles de cómo ocurrió el busazo

Fustigan a DGT

Señalamientos de toda clase caen sobre la Dirección General de Transportes (DGT), cada vez con más intensidad, desde el accidente del autobús extraurbano en el kilómetro 64 de la ruta de San Martín Jilotepeque a Chimaltenango, el 9 de septiembre último, el cual ha dejado 48 muertos.

Desde denuncias de corrupción hasta acusaciones de priorizar a empresas grandes, sectores de transportistas se ven motivados a hacer públicas sus quejas, muchas de las cuales, aseguraron, ya las había escuchado el presidente Otto Pérez Molina.

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