Las plantas tienen una altura aproximada de 60 centímetros y se cree que en poco tiempo entrarían en etapa de producción.
Las fuerzas de seguridad rodean, desde la noche del martes, los lugares en donde fueron localizadas las plantas y siguen a la espera de fiscales del Ministerio Público (MP) para que las contabilicen y calculen el valor de estas, para luego quemarlas.
Investigadores de la PNC tratan de establecer quienes son los propietarios de los terrenos en donde se encuentran las plantaciones. Además efectúan rastreo por la zona en busca de más ilícitos.