“He tenido que dejar de utilizar el teléfono residencial, y la única forma de comunicarme con mis hijos y esposa es a través de los teléfonos móviles”, dijo García.
Maximiliano Cifuentes, afectado, indicó que hace unos tres meses recibió una llamada telefónica en la cual los delincuentes le exigían Q50 mil a cambio de no secuestrar a una de sus hijas, y le dejaron un plazo de cuatro días para que fuera a dejar el dinero en un sector fuera del poblado.
“Tuve que hacer un préstamo para entregarles el dinero, pero lo lamentable de esta situación es que continuaron molestándome, por lo que mejor desconecté el teléfono de mi hogar”, indicó Cifuentes.
Artemio Carrillo, otro de los residentes, dijo que delincuentes dejaron debajo de la puerta principal de su residencia un sobre con un papel en el que le exigían Q10 mil a cambio de no matar a un su hijo, por lo que tuvo que entregarles el dinero.
Modesto Ixtecoc, jefe de la Comisaría 73 de Chimaltenango, explicó que se reabrirá una subestación policial en este lugar, ya que se cerró por un conflicto con algunos pobladores, y podría estar ya en funcionamiento a finales de este mes, con lo cual atenderían a todas aquellas personas para que denuncien estos hechos ilícitos.