El gobernador departamental, Benjamín Torres, dijo que están preocupados porque han apoyado con seguridad a Esquipulas para evitar la violencia, pero esta no cesa.
Refirió que los comerciantes se han organizado y solicitado ayuda, porque no soportan tanto crimen y tienen miedo de que la violencia aleje al turismo.
Estadísticas
Datos de las autoridades refieren que en lo que va del año, 73 personas han muerto en forma violenta, de las cuales 65 han sido con arma de fuego.
Revelan que los lugares más peligrosos son la aldea Chanmagua y el área urbana.
Carlos Lapola, alcalde de Esquipulas, informó que se reunió con el gobernador Torres, ya que la criminalidad ya es insostenible en esa ciudad, pues los delincuentes le han robado la tranquilidad a la población, que ya no quiere salir a la calle por temor.
“Esperamos una respuesta pronta para evitar que más personas pierdan la vida, porque hay temor en la población. Recordamos que hace algunos meses se hizo una caminata por la paz, y a los segundos de haber finalizado la actividad, desconocidos mataron a dos hombres”, recordó Lapola.
Testimonios
Mary de Ponce, vecina de Esquipulas, refirió que es alarmante lo que sucede en el municipio, pero las familias deben refugiarse en Dios y así las cosas pueden cambiar.
“A la población se le pide paciencia y tener confianza en las autoridades, ya que hemos visto que han hecho su trabajo, pero la espiral de violencia no se detiene”, puntualizó De Ponce.
Manuel Vega, otro residente, dijo que la población espera una respuesta pronta sobre la estrategia que usarán las autoridades para frenar este flagelo.
Dijo que es preocupante que Esquipulas, capital centroamericana de la fe, esté entre los tres municipios más violentos de Chiquimula.
Quieren al Ejército
Marcos Gutiérrez, otro de los residentes, dijo que en muchos lugares no desean que el Ejército cumpla con trabajos de seguridad ciudadana, pero que en ese municipio la población urge la presencia de los militares, porque creen que solo así se logrará combatir la delincuencia y reducir el índice de criminalidad.
Según los vecinos, la mayoría de muertes están relacionadas con maras y el narcotráfico, y es en esos ejes donde las autoridades deberían trabajar.
Añadieron que como Esquipulas es un municipio fronterizo, hay mucho tráfico de armas, drogas y trata de personas, y eso lo convierte en un lugar peligroso.
Fernanda Rosales, vecina de Esquipulas, criticó la labor de la Policía en ese municipio, pues constantemente hacen allanamientos y se obtienen resultados, pero pareciera que no es suficiente para controlar a las bandas del crimen organizado.