El informe policial detalla que ambas personas mezclaban aserrín con gallinaza para abonar tierra en la aldea Tierra Blanca, en Guastatoya, El Progreso.
Añade que fueron trasladados aún con signos vitales hacia un hospital privado de la localidad, pero murieron por causas que se desconocen.
Peritos del Ministerio Público efectuaron las diligencias de ley y ordenaron el traslado de los dos cadáveres hacia la sede del Instituto Nacional de Ciencias Forenses para que esa institución determine la causa de la muerte o si hubo mano criminal.
Se trató de comunicarse vía telefónica con el hospital donde fueron atendidos ambos empleados, con el fin de conocer las posibles causas de la muerte, pero el personal no contestó las llamadas.