Atraído por la música regional mexicana, el artista guatemalteco había logrado abrirse paso en el mundo de la música. Prueba de ello es que, como era su sueño, logró abrir conciertos de otros cantantes de la talla de Edwin Luna y el Komander.
A varios meses de su desaparición, Juliana de León, madre del cantante, abre las puertas de su casa y cuenta cómo vive estos tiempos de angustia, en los que no pierde las esperanzas de que su hijo llegue de nuevo sonriente y satisfecho por sus logros y abrazarse como siempre lo hacían.