Eso fue lo primero que recordó el guatemalteco Jorge Aucar, quien estudia y reside en ese país, durante una entrevista que concedió a Prensa Libre y Guatevisión sobre los eventos que ocurrieron desde el pasado lunes 6 de febrero.
Aunque en la región de Bursa, donde él se encuentra, el terremoto no tuvo un impacto significativo, las réplicas de los eventos sísmicos hicieron que las personas del lugar estuvieran en alerta y a la expectativa de lo qué podía llegar a suceder.
“Yo me desperté con una llamada de mi familia, preguntándome si estaba bien y se había pasado algo en la ciudad en la que yo estoy. Gracias a Dios por estas partes no pasó nada, pero sí hubo un poco de miedo porque si hubo un par de temblores y la gente en las calles estaba con incertidumbre al ver todo el desastre que había pasado (en otras regiones)”, explicó Aucar.
Reúnen apoyo tras terremoto en Turquía
Afortunadamente las vías de comunicación no se cortaron totalmente por el terremoto y han utilizado las redes sociales para coordinar apoyo y la recepción y entrega de ayuda humanitaria.
“Nosotros estamos utilizando bastante las redes sociales, más que todo WhatsApp e Instagram para ponernos en comunicación con las personas que tal vez están atrapadas bajo los escombros de los edificios que se cayeron”, afirmó.
“También (usamos las redes) para realizar ayudas y recolectar los víveres que se están llevando a centros especiales por parte de las municipalidades o por parte de los negocios, para que después se trasladan por tráileres y puedan llegar a las zonas de desastres para los damnificados”, agregó.
Para el guatemalteco ha sido una experiencia difícil de asimilar.
“Es una situación muy lamentable. Ver todo esto lo que está pasando, tanto para locales como para los extranjeros que están viviendo aquí, como yo. No es algo muy fácil de ver”, aseguró Aucar.
Los terremotos afectaron también al país vecino, Siria, pero Turquía fue la más castigada por los potentes movimientos telúricos, principalmente por el sismo de magnitud 7.8.
Los rescatistas trabajan contrarreloj enfrentándose a difíciles condiciones por las temperaturas gélidas y las réplicas que siguen registrándose.
En Turquía se declararon siete días de luto y hasta ahora el número de fallecidos alcanzó los 11 mil 700, según cifras oficiales.
“El gobierno está dentro de sus posibilidades mandando toda la ayuda posible, tanto este gobierno como los países vecinos que están apoyando a Turquía, que están enviando equipos de rescate para auxiliar a las personas que siguen atrapadas. Se está viendo mucho apoyo y esperemos que siga siendo así hasta que todos se recuperen”, aseguró.
Aucar contó que llegó al país transcontinental porque siempre deseó estudiar en el extranjero. Tuvo la oportunidad de viajar a Turquía, donde casi concluye sus estudios para una licenciatura en Relaciones Internacionales.
Aucar compartió imágenes de unos de los centros de acopio en lo que se observa a varias personas ordenando las cajas de víveres y otros artículos.