“En varias oportunidades solicitamos audiencia con las autoridades de la Municipalidad, pero no nos atienden; por eso hemos acudido a la Procuraduría de los Derechos Humanos (PDH) y a la Inspectoría de Trabajo, para que nos ayuden a solucionar nuestro problema”, expresó.
García reiteró que no se retirarán de la Municipalidad hasta que les paguen, y si es necesario, tomarán el edificio, como medida de presión.
“Hay compañeros que tienen las piernas amputadas; otros necesitan dinero para comprar pañales y no lo pueden hacer, porque sus familias no tienen dinero; a la Municipalidad ingresan fondos y no entendemos por qué no nos han pagado”, lamentó.
Otra de las peticiones de los inconformes es que se les paguen seis quincenas de salario atrasado a los empleados municipales.
José Freddy López, de la PDH, afirmó: “Estamos acompañándolos para lograr el acercamiento con el alcalde”.
El jefe edil, David Pineda, expuso que la Municipalidad está sin fondos, y eso dificulta cumplir con el pago. “No puedo decir cuándo podremos hacer los pagos, porque los bancos ya no nos prestan más dinero”, indicó.
“El viernes de la próxima semana vamos a abonar algo de la deuda que se tiene con los jubilados y con los empleados, pues estamos conscientes de que todos trabajamos porque tenemos necesidad, aunque esta vez las deudas adquiridas en años anteriores no nos han dejado respirar”, puntualizó.