El hallazgo lo efectuaron vecinos que caminaban por el lugar y alertaron a las autoridades para que procedieran a levantar el cuerpo y enviarlo a la morgue del Instituto Nacional de Ciencias Forenses de Puerto Barrios.
Investigadores presumen que el ataque pudo haber sido por problemas pasionales, porque en el lugar encontraron preservativos usados, los cuales usó la víctima con una mujer casada, cuyo conviviente la siguió al lugar del crimen.
Indicaron que en las manos Tzoc Ramírez tenía pedazos de piel, presuntamente de su agresor, porque intentó defenderse.
El joven fue reconocido por su padre Pedro Tzoc, quien mencionó a los investigadores que desconocía si su hijo tenía problemas con alguien.