La adolescente se desmayó tras haber presenciado el crimen, por lo que fue auxiliada, informó el bombero voluntario Celso Hernández.
Escenas de dolor
Con la voz entrecortada por el llanto, Lesbia Barrera Ortiz, esposa de la víctima, expuso: “Qué te hicieron, mi amor; por qué le quitaron la vida, si él no se metía con nadie y no le debía nada a nadie”.
La consternada mujer agregó: “Ingratos, dejaron a mis seis hijos sin su padre y terminaron con los 35 años de matrimonio. Tienen que pagar lo que le hicieron a mi esposo”.
Familiares y amigos que llegaron a la escena repudiaron el crimen y aseguraron que Solares Loy era amable.
Efrén Solares, hermano de la víctima, manifestó que los fines de semana, Solares Loy era el encargado del mercado de Mataquescuintla.
El alcalde, Hugo Loy, mostró su consternación. También exigió a las autoridades que investiguen el crimen.
La PNC afirmó que el malhechor tenía vigilado a Solares Loy; según versiones, el crimen lo cometió un individuo que vestía chumpa de cuero, pantalón de lona negra y gorra. Testigos aseguraron que Solares le pidió al sicario que no le hiciera daño a su hija.