La niña resultó con golpes leves, que no ameritaron hospitalización.
El pequeño atropellado fue llevado aún con vida al Hospital Nacional de Jalapa, en un automóvil particular, pero murió poco después de haber sido ingresado.
Abandona vehículo
Cruz Ramírez aseguró que el automotor era conducido por un menor de edad, a quien conoce.
El vehículo quedó abandonado en el lugar y la PNC solo encontró la tarjeta de circulación a nombre de Édgar Orlando García Monterroso.
Cruz Ramírez llevó ayer a su hija, Zulmi, a la clínica del Instituto Nacional de Ciencias Forenses para que fuera evaluada por las lesiones que sufrió en el percance; sin embargo, empleados de esa institución les indicaron que no sería examinada porque no había médico en ese momento.
El subcomisario Julio César Gutiérrez señaló que el vehículo que era conducido supuestamente por un menor fue consignado, pues quedó abandonado en el lugar del percance.
“Es una irresponsabilidad dejar que un menor de edad conduzca un automóvil, pues no miden las consecuencias de sus acciones”, aseguró Gutiérrez.